LA ILUSIÓN QUE NOS MUEVE
EL tiempo pasa y casi sin darnos cuenta nos encontramos ya en el ecuador de la Corporación municipal. Dos años marcados, sin duda, por una pandemia que ha condicionado nuestras vidas y también la gestión municipal. Los almerienses hemos sido un ejemplo de compromiso, solidaridad y responsabilidad en estos meses tan complicados en los que desde el Ayuntamiento hemos intentando dar la respuesta, en la medida de nuestras posibilidades, a las necesidades que han ido sobreviniendo en una situación nueva para todos.
El COVID ha trastocado todos los planes, generando, tras la crisis sanitaria, un devastador tsunami económico y social que desde lo local hemos gestionado con mucha voluntad y limitados recursos, pero con los deberes hechos, pudiendo así ejercer de dique de contención ante la situación derivada de la pandemia, abriendo un paraguas económico, social y fiscal para ayudar a quienes más han sufrido, que no han sido pocos.
Como destacó el alcalde en el debate del Estado de la Ciudad del pasado
Queremos una Almería ejemplo de modernidad, abierta y de la que nos sintamos orgullosos
viernes, fuimos la primera administración en dar respuesta, a través de los planes ‘Reactiva 20’ y ‘Reactiva21’, a las necesidades de las personas y colectivos, movilizando recursos, reduciendo, cuando no eliminando, tasas e impuestos y proporcionando ayudas directas a familias, asociaciones, empresas y autónomos, a sectores como la hostelería, el turismo, el comercio…, movilizando en torno a 70 millones de euros para ello.
Y lo hemos hecho sin renunciar a seguir avanzando en un proyecto global para una ciudad centrada en las personas; que será más inclusiva, accesible y social; generadora de empleo y mejor vertebrada. También aspiramos a una ciudad con un Casco Histórico atractivo y fortalecida en sectores económicos fundamentales como son el comercial y el hostelero, impulsando además los recursos turísticos y patrimoniales en torno a nuestro principal monumento, la Alcazaba, para su definitiva puesta en valor.
Queremos, en definitiva, una ciudad cada vez más cohesionada, participativa, solidaria y sostenible. Una Almería ejemplo de modernidad, abierta, que ilusione y de la que nos sintamos cada día más orgullosos. Porque, con nuestros aciertos y nuestros errores, somos afortunados de vivir en la mejor ciudad del mundo.