“He sido durante 35 años la bibliotecaria de mi pueblo: Gádor”
● Es de Nacimiento aunque con 4 años se fue a Gádor ● Se licenció en Historia del Arte ● En 1988 aprobó las oposiciones de Bibliotecas hasta su jubilación en 2022
El pasado 13 de diciembre de 2022 cuando el orbe católico se disponía a celebrar la Navidad, Ramonina Polo Ruiz abría por última vez tras 35 años la Biblioteca Municipal de Gádor. Lejos quedaba el año 1988 en que se inauguró, con Ramonina como única bibliotecaria desde aquella fecha. Cuatro meses han pasado ya desde entonces.
–Eso se llama ‘ser profeta en tu tierra’...
–Bueno, yo nací en Nacimiento aunque mucha gente cree que soy de Gádor y es que mis padres se trasladaron aquí cuando yo tenía sólo 4 años. De Nacimiento prácticamente sólo recuerdo el lavadero y los caños por los que brotaba agua fresquísima y abundante. Mis recuerdos infantiles son casi todos gadorenses.
–Aunque pronto te fuiste interna a la Compañía de María.
–Sí, en Gádor hice la EGB, con mi maestro D. Rafael del que guardo muy buen recuerdo. A los 10 años me mandaron al internado de la Compañía de María donde estudié Bachillerato. Sigo teniendo contacto con bastantes compas de entonces: Mari France, Encarni Villanueva, Josefina Acién, Pilar Alcoba... Y recuerdo especialmente a las directoras: la madres Amalia Varo, Angelita Ganivet y Marujina Camacho.
–Buenos recuerdos de allí... excepto
de la comida.
–¡Ja, ja, ja! Era muy delicada para comer y a veces escondía la comida en los bolsillos del baby para salir del comedor sin comer. Teníamos prohibido hacernos alguna otra comida. Un día fue el cumple de una compañera, Adela, e hicimos una excursión nocturna a la cocina para hacerle una tarta. Como no veíamos platos, la hicimos en una palangana.
–De allí, al Colegio Universitario y luego a Granada.
–Aquí estudié los tres años comunes de Historia y en Granada, la especialidad de Arte. Por cierto, tardé un año más porque me pilló en medio la rivalidad de dos profesores y uno de ellos me hizo examinarme cinco convocatorias de ¡25 folios! Hasta el Catedrático y Jefe de Departamento intervino en el tema.
–Aquellas clases en la Alhambra, inolvidables.
–¡Y que lo digas! Dábamos una asignatura de Arte Musulmán en la Alhambra... cuando se podía hacer aquello. Tres día en semana íbamos para allá y nos empapábamos de su embrujo. A tanto llegaba que una tarde quedamos encerrados en el Palacio de Carlos V y allí pasamos la noche.
–Bueno, pues ya te tenemos de Licenciada en Historia del Arte.
–Dí clases particulares hasta que en 1988 se convocaron oposiciones a Bibliotecas. Iban a abrirlas en Gádor, Huércal y Viator. Las cosas me fueron bien y las aprobé. Ocupé la plaza de Gádor, de la que fui primera y única bibliotecaria hasta mi jubilación, el 13 de diciembre de 2022, casi 35 años.
–Tiempo en que has dignificado ‘tu’ biblioteca...
–Pues mira, hemos ganado hasta cinco premios ‘María Moliner’, la más alta distinción a nivel nacional. Recuerdo con especial cariño uno de Integración y, sobre todo, el de Recuperación de Tradiciones Locales. Recopilamos costumbres y tradiciones lde Gádor que prácticamente habían desaparecido y sólo conservaban en la memoria los vejecitos. Participó medio pueblo...
–O sea, que el tópico de la bibliotecaria soltera, seca, seria y con moño no es cierto.
–¡Ja, ja, ja! Pues mira, conozco a casi todas las de pueblos de Almería y ninguna encaja en ese parámetro. Es cierto que la mayoría son mujeres pero casadas, con familia...y llevan el pelo suelto.
–Y llega la hora de la jubilación.
–La alcaldesa contacó conmigo y le dije que yo no quería ninguna fiesta, que donaran ese dinero a una ONG. Pero llamó a mi hija y entre ambas me hicieron una encerrona: fui a ‘mi’ biblioteca y allí había un montón de gente esperándome. Me regalaron un ramo de flores, una placa, una pulsera y pasamos un rato muy agradable, el broche de oro a 35 años de bibliotecaria de mi pueblo.
En 1988 abrieron la biblioteca de Gádor y yo aprobé las oposiciones: fue mi primer y único destino laboral”