EL ACTA DE VIVANCOS
OTRO capítulo similar a los vividos lejos del Power Horse Stadium.Y eso que la UDA tuvo tiempo de preparar el choque al amparo del buen ambiente tras la victoria ante el Elche. Pero nada, este Almería de foráneo es un conjunto plano, que deambula sobre el terreno de juego ajeno, sobre todo cuando se enfrenta a los rivales de la parte media alta de la clasificación. Fue como si los once jugadores de Rubi hubieran sido espectadores de lujo, porque ni defendieron ni atacaron, tan solo se limitaron a presenciar de cerca las acciones de sus oponentes. De ahí salvaría a Luis Suárez, el único que peleó con tesón a la hora de presionar y de intentar crear peligro. Se podía perder en Pamplona, pero la imagen ofrecida confirma la dinámica de los diferentes equipos dirigidos
Los de Rubi ni defendieron ni atacaron, se limitaron a contemplar al rival
por Rubi en Primera fuera de casa. Contar desde el inicio con un jugador como Embarba en El Sadar, sólo porque realizó un buen encuentro en casa ante el Elche, dice muy poco de la estrategia de un técnico. Este choque requería de un planteamiento completamente diferente si uno analiza al rival que tiene enfrente. Un jugador como Arnau, centrocampista todoterreno, se hubiera adaptado mejor en ayuda de la parcela central y como apoyo a los dos delanteros restantes. Osasuna es un equipo agresivo, que iba a otra revolución con respecto a los jugadores de Rubi, y así lo ejecuta porque su entrenador les aleccionará, no porque en su ADN lleven escrito esos jugadores que deben actuar así. Comento esto último porque Rubi dijo al término del encuentro que su rival ya lleva intrínseco ese marchamo de agresividad. Desde luego, ¡qué cosas hay que escuchar! Este Almería ha logrado 43 tantos en liga hasta el momento, pese a que fuera de