Una plaza para todo tipo de celebraciones
● La Isla relega los toros en favor de otros usos que abarcan desde la hostelería hasta los conciertos
La plaza de toros de La Isla ha dado el paso decisivo para convertirse en La Plaza. Así, a secas. Sin toros. Los espectáculos taurinos quedan definitivamente relegados a un papel secundario –lo que, en realidad, no es más que un reconocimiento de la realidad del coso en las últimas décadas– y el recinto abraza definitivamente otros usos: hostelería, salón de celebraciones, terraza-velador, espectáculos y conciertos... Es la nueva vida a la que aspira la histórica plaza de toros.
Las obras de adaptación se llevaron a cabo el año pasado y se completaron en el pasado mes de julio, con puesta de largo incluida. Aunque hasta ahora –transcurridos ya seis meses de la remodelación– no se ha obtenido la autorización del
Ayuntamiento para poder llevar a la práctica estos otros usos.
La calificación ambiental para permitir la compatibilidad de uso de plaza de toros como establecimiento de esparcimiento, salón de celebraciones y terraza-velador ultima ya su periodo de información pública y a finales de mes está incluso prevista la apertura de una taberna que se ha habilitado en el recinto.
La empresa que gestiona el coso isleño, Albero Eventos 1871, ha llegado a acuerdos tanto con la Asociación Isleña de Hostelería
y Turismo (Asihtur) como con la rama de hostelería de la Asociación de Comerciantes (Acosafe-Hisafe), para promover actividades conjuntas.
Las instalaciones, a partir de ahora, únicamente se utilizarán como plaza de toros en dos momentos exclusivos: durante la Feria del Carmen y en torno a los actos festivos del 24 de septiembre, ocasiones ambas en las que hasta ahora –a excepción del año de la pandemia– ha sido habitual la celebración de espectáculos taurinos.
El resto del año se dedicarán a los usos antes mencionados: salón de celebraciones (en interior de carpa), hostelería con música (en interior de carpa) y terrazavelador vinculada a hostelería con música. Todos estos usos están ya autorizados con el expediente que ha tramitado el Ayuntamiento isleño. A ello se suma la posibilidad de dar cabida a actividades recreativas ocasionales, como conciertos, que también podrán realizarse pero que precisarán de la tramitación de expedientes independientes y autorizaciones expresas para cada caso.
Como espacio de esparcimiento, La Plaza cuenta con un aforo total con capacidad para 2.618 personas. Para su uso como salón de celebraciones, el recinto dispone de aforo para 600 personas. Y hasta 200 si se trata de su uso como terraza.
Para su uso como salón de celebraciones, el recinto dispone de 600 plazas en total