Los nombres de una Liga malograda
● Análisis del chasco del Barcelona, que dependía de sí mismo para dar caza al Atlético, hombre por hombre
El Barcelona fue el primero de los tres grandes en caerse de la carrera por la Liga, ahogado en sus carencias en un final decepcionante que desnudó las dificultades de su plantilla y de su entrenador.
Así fue la temporada liguera, uno por uno, de los jugadores azulgranas, que dependían de sí mismos a falta de seis encuentros y que acabaron por protagonizar un fin de ciclo anunciado incluso por el presidente, Joan Laporta.
RONALD KOEMAN
Insuficiente. Su revolución nunca acabó de llegar, quizás por inacción de la directiva, y acabó abrazado a la columna vertebral clásica de los últimos años protegida por un sistema de tres centrales y un coro de jóvenes. No funcionó su estrategia y no supo trazar otra. Su futuro está en el aire, pendiente de una conversación con Laporta para saber si el club le da confianza para cumplir su año de contrato.
MARC-ANDRÉ TER STEGEN
Extraño. El alemán sostuvo al equipo en varios momentos, cuando nada funcionaba todavía, pero su rendimiento al final, con más dudas bajo palos de las habituales, no se correspondió con su historial. En todo caso, su compromiso está fuera de dudas: se perderá la Eurocopa con su selección para operarse de la rodilla.
NETO MURARA
Incapaz. El brasileño no pudo hacer sombra a Ter Stegen y, después de suplirlo en los seis primeros partidos de Liga por lesión, no volvió a jugar hasta el último día, cuando ya no había nada en juego. En la rampa de salida.
SERGIÑO DEST
Decepcionante. El lateral estadounidense llegó al Barça por petición expresa de Koeman ante una gran expectación, ya que el Bayern de Múnich también pujaba por su fichaje. Nada más lejos de la realidad: no ha mejorado a otros laterales recientes como Semedo. El próximo año deberá demostrar que merece la banda derecha del Camp Nou.
SERGI ROBERTO
Señalado. Cuarto capitán del equipo y sólo 15 partidos de Liga sin ofrecer nada distinto. Es parte del núcleo duro del vestuario, por lo que su nombre está en boca de muchos aficionados que querrían una renovación de la plantilla.
ÓSCAR MINGUEZA
Sorpresa. Nadie esperaba su irrupción y el canterano ha logrado sumar 27 encuentros en su debut. Seguro atrás y eficiente con balón dio más de lo pronosticado, pero todavía tiene cosas por pulir.
RONALD ARAÚJO
De más a menos. El central uruguayo tuvo una aparición fulgurante en el equipo, asentándose como el central más fiable en ausencia de Piqué. Pero un esguince en febrero le alejó del once y le quitó continuidad, por lo que en el tramo final fue más una alternativa que un titular. En todo caso, se presume fijo en el equipo renovado que buscará confeccionar Laporta.
GERARD PIQUÉ
Veterano. Los problemas en su rodilla sólo le permitieron jugar 18 partidos, pero se erigió en jerarca de la defensa en el tramo final. Pese a estar renqueante, su figura ayudó a dar empaque al equipo y confianza a los jóvenes. Miembro del núcleo duro del vestuario desde hace innumerables campañas, el catalán también es señalado por sectores azulgranas que piden a los veteranos hacerse a un lado.
CLÉMENT LENGLET
Equivocado. Así se define la temporada del francés: varios errores suyos, siempre en la foto, costaron puntos al Barcelona que se antojaron claves en un campeonato tan igualado. No parece peligrar su futuro de azulgrana.
SAMUEL UMTITI
Ausente. El central no ha vuelto a su nivel desde que forzara para jugar el Mundial de 2018 con Francia. Este año no ha sido la excepción, con varios momentos impropios de un futbolista de primer nivel. Todo hace indicar que no volverá a vestir la camiseta del Barcelona.
JORDI ALBA
Importante. El lateral zurdo, reconvertido en carrilero, fue una pieza fundamental del ataque barcelonista y ofreció por momentos un gran rendimiento, pero es otra vaca sagrada siempre en boca de los que apelan por la renovación del vestuario.
JÚNIOR FIRPO
Olvidado. Sólo ha disputado siete encuentros ligueros, a menudo como alternativa para cerrar el marcador, pero Koeman no ha reparado en él para el más mínimo reto. A la vista de los acontecimientos, su futuro no tiene pinta de pasar por el Camp Nou.
SERGIO BUSQUETS
Maestro. El sistema con tres centrales protegió su espalda y el 5 fue el nódulo que hilvanó el mejor juego de los de Koeman, revelándose clave sobre todo con su ausencia en el partido contra el Atlético de Madrid. Pero es otro de los señalados de cara a una revolución por antigüedad y por su peso en el vestuario.
FRENKIE DE JONG
Crecido. El holandés sigue sin tocar el título de Liga vestido de azulgrana, pero esta temporada confirmó los pronósticos más optimistas con un enorme rendimiento. Se antoja como uno de los puntales del Barça que está por nacer.
PEDRO GONZÁLEZ ‘PEDRI’
Consagrado. De fichaje sin fuste a titular indiscutible, sólo se ha perdido un partido liguero. A ratos el mejor socio de Messi, la alegría del juego del joven canario y su habilidad asociativa lo convierten en una de las mayores esperanzas del futuro azulgrana.
MIRALEM PJANIC
Intrascendente. Su incorporación parecía un valor seguro, pero el bosnio no ha contado para Koeman en su primera temporada en Barcelona. Lento y torpe los pocos minutos que ha tenido, no se vislumbra que haya lugar para él la próxima temporada.
RIQUI PUIG
Castigado. Desde la pretemporada sabía que no iba a tener muchos minutos y no los tuvo. Su relación con Koeman es muy complicada, pero el joven siempre ha repetido su intención de triunfar en el club de su vida y lo volverá a intentar tras el verano.
ILAIX MORIBA
Debutante. El canterano, de 18 años, debutó en la Liga en febrero y acumuló participación en 14 encuentros desde entonces. Del agrado de Koeman, pasó por delante de Pjanic, Puig y Sergi Roberto en minutos importantes.
PHILIPPE COUTINHO
Lesionado. El brasileño lleva fuera de los terrenos de juego desde enero por una lesión de menisco, aunque sus actuaciones de la primera mitad de temporada tampoco dijeron nada nuevo. Su retorno del Bayern no cambió su mala realidad en Barcelona, ciudad que podría abandonar de cara a la próxima campaña.
ANTOINE GRIEZMANN
Reivindicado. El atacante mejoró sus prestaciones en su segunda temporada en el club, aunque no lo suficiente para justificar su precio de más de 120 millones de euros. 13 goles, algunos importantes, y 7 asistencias en la Liga avalan su continuidad en el club si una oferta inverosímil no lo impide.
LIONEL MESSI
Deseado. Santo y seña del Barcelona, empezó con el paso cambiado pero volvió a ser el mejor de su equipo, con 30 tantos en Liga y su quinto Pichichi seguido. Laporta ha hecho de su renovación –acaba contrato en verano– la prioridad, aunque lo tientan otros clubes.
OUSMANE DEMBÉLÉ
Adaptado. El francés jugó por fin 30 choques de Liga en una misma temporada, sin tantas lesiones, e ilusionó más por lo que parece que puede llegar a ser que por lo que fue. Su alto valor de mercado y los problemas financieros del club podrían hacer que saliera, pero es un buen activo para el futuro.
ANSU FATI
Preocupante. Una lesión de rodilla cortó en seco su progresión. La sufrió en noviembre y era para cuatro meses, pero no volvió en toda la temporada tras cuatro pasos por el quirófano. Su estado a los 18 años, preocupa mucho.
FRANCISCO TRINCAO
Trabado. El extremo portugués no ofreció el desequilibro que prometían los 31 millones de euros de su traspaso. Minutos marginales o a la desesperada.
MARTIN BRAITHWAITE
Justo. El único delantero centro puro de la plantilla acabó LaLiga con dos goles y 1.160 minutos jugados. Todo entrega, su nivel está lejos de la exigencia del Barcelona.