“Aplicaremos la tecnología probada en Riotinto en otras explotaciones mineras”
Jesús de la Rosa. Universidad de Huelva
EL catedrático de geoquímica de Universidad de Huelva, Jesús de la Rosa, y su equipo de investigación, la Unidad Asociada al CSIC-UHU
Contaminación Atmósferica del Centro de Investigación en Química Sostenible, llevan años trabajando junto con Atalaya para establecer un sistema de control y mejora de la calidad del aire en el entorno minero.
–¿Cómo es la situación con respecto a la calidad del aire actualmente en el entorno de la mina?
–Con los datos existentes en la actualidad nos dicen que se cumplen con bastante holgura los valores límites y objetivos de las directivas europeas relacionadas con calidad. Nuestro grupo trabaja desde el año 2009 en el entorno, y ha constatado distintas fases de evolución de la concentración y química de los aerosoles. En la actualidad los valores son muy similares a la fase inicial de nuestras medidas.
–¿En qué consiste la colaboración de Atalaya y la Universidad de Huelva?
–Tenemos en marcha el Proyecto de Investigación Caracterización Físico-Química y Contribución de Fuentes de Aerosoles Atmosféricos Inorgánicos y Orgánicos en la Cuenca Minera del Rio Tinto, conjuntamente entre Atalaya Mining y nuestro grupo de investigación. Consiste en conocer la contribución de fuentes al aerosol atmosférico en esta área. Se aplican nuevas metodologías de medida en tiempo real relacionadas con los aerosoles mediante sensores de última generación. En la actualidad ya está implantada la red de medida en tiempo real y se está estudiando un prototipo único para ambientes mineros, que se adaptará a un dron que tomará medidas en tiempo real sin necesidad de desplazamiento ni someterse a riesgos propios de la explotación.
–¿Qué relevancia científica tiene este proyecto? ¿Es lo habitual en la industria?
–Tenemos el propósito de aplicar la investigación y la aplicación tecnológica resultante a minas a cielo abierto o a empresas de explotación y logística de minerales, nacionales e internacionales. Hasta donde sabemos, es la primera vez que se establecen puentes de colaboración en I+D+i entre empresas mineras y universidades en el ámbito de calidad del aire. El éxito de proyecto radica en que los grupos de trabajo hemos creado un espacio de mutua confianza y de alta implicación en el medio ambiente.