Desbandada británica en el Algarve
● Unos 20.000 turistas se van de Portugal para evitar la cuarentena obligatoria en el Reino Unido
Miles de turistas británicos abarrotaron ayer el aeropuerto de Faro, la capital del Algarve, para regresar a su país antes de que Portugal quede fuera de lista verde del Gobierno de Boris Johnson y evitar así una cuarentena obligatoria en el Reino Unido. Unos 20.000 británicos abandonaron el Algarve –su principal destino en Portugal– durante el fin de semana y varios miles más lo harán hoy en los 30 vuelos programados desde el aeropuerto de Faro, la capital algarvia, a diferentes destinos en Gran Bretaña.
Londres rectificó y sacó a Portugal de la lista verde sólo tres semanas después de incluirlo en ella con el argumento de que han identificado 68 casos de la variante india de Covid.
Desde la pasada madrugada, Portugal entrará en la lista ámbar de Londres, que obliga al visitante a someterse a dos PCR –el segundo y octavo día– tras llegar al Reino Unido y a mantener 10 días de confinamiento. La desbandada de británicos ha colapsado los laboratorios del Algarve y ha desbordados los servicios de test rápidos del aeropuerto de Faro, donde miles de personas han tenido que esperar varias horas antes de poder embarcar.
Las imágenes colgadas por los usuarios en las redes sociales muestran las salas del aeropuerto abarrotadas y a cientos de viajeros agolpados con sus equipajes sin guardar la distancia de seguridad.
Muchos han denunciado a medios locales que han perdido sus vuelos debido a un fallo en la plataforma británica que ofrecía un formulario online imprescindible para regresar a casa.
En medio del caos, los precios de los billetes se han disparado. British Airways por ejemplo ofrece hoy un Faro-Londres por hasta 400 euros mientras que a finales de semana baja a 120 euros; el billete en Easy Jet pasa de 233 euros a 42 a partir del miércoles.
También las tarifas hoteleras bajaron desde ayer sensiblemente en el Algarve sobre los precios anunciados para estas fechas.
La decisión de Londres castiga al sector turístico portugués, que confiaba en que la vuelta del viajero británico facilitaría la recuperación tras el desplome de 2020 provocado por la pandemia. No obstante, el presidente de Turismo del Algarve, Joao Fernandes, no pierde la esperanza: “Durante el fin de semana se fueron aproximadamente 20.000 británicos de vuelta para Reino Unido, pero al mismo tiempo llegaron cerca de 6.000, lo que es también una buena señal de confianza en el Algarve”, afirmó.
Fernandes evita cuantificar las pérdidas que supondrá este revés y prefiere centrarse en las alternativas al mercado británico entre sus vecinos europeos. “Normalmente tenemos 6 millones de pernoctaciones en hoteles del Algarve de británicos, 1,8 de alemanes y aproximadamente 1 millón de españoles, de holandeses, de irlandeses y de franceses”, apuntó.
“Contábamos con el mercado británico, es una desilusión enorme”, admitió el presidente de la Asociación de Hoteles y Emprendimientos Turísticos del Algarve, Eliderico Viegas. El empresario calificó la decisión como “totalmente infundada e injustificada” por los buenos resultados del Algarve en el control de la pandemia.
Para el primer ministro portugués, Antonio Costa, no hay justificación. “La medida no se justifica” y causa “graves perjuicios” incluso a los británicos. Tampoco los expertos portugueses consideran que los 68 casos de la variante india de Portugal amparen una decisión de este calado. El país luso, con 10 millones de habitantes, suma 17.036 muertos y 853.034 casos de Covid. Reino Unido, con una población de 66 millones, alcanza 4,5 millones de casos y 128.000 muertos.
Londres rectificó y sacó de la lista verde al país luso tras detectar 68 casos de la cepa india