Conmoción en España por el nuevo crimen machista
● Anoche se llevaron a cabo concentraciones en muchas localidades
El asesinato de Rocío Caíz conmocionó ayer a toda España, que expresó en silencio su repulsa por los crímenes de las menores. Multitud de personas guardaron en las calles minutos de silencio por las muertes de la pequeña Olivia, de 6 años y Rocío, de 17; unos crímenes que han hecho saltar todas las alarmas de la violencia machista y vicaria, la que ejercen padres para causar el mayor daño a sus madres.
El movimiento feminista convocó concentraciones anoche frente a los ayuntamientos de pueblos y ciudades de todo el país tras este repunte de asesinatos. “Lo vamos a tirar”, “ni una menos” y “si nos tocan a una, nos tocan a todas” son los lemas de esta convocatoria de urgencia, que se puso en marcha tras la aparición del cuerpo sin vida de Olivia, por cuya muerte expresó “dolor y tristeza” la reina Letizia, al igual que lo hizo por Rocío.
“No puede haber nadie que no intente ponerse en la piel de las personas que aman a estas niñas, a estas menores asesinadas”, dijo emocionada la reina.
Por ello, la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, quiso dejar claro que hay una violencia contra las mujeres por el hecho de serlo y que además se les ataca a través de lo que mas quieren, sus hijos.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, apeló a la justicia feminista: “todas esas mujeres y niñas necesitan hoy nuestro abrazo, el apoyo del conjunto de la sociedad y necesitan justicia feminista”, señaló la número dos de Podemos.
Visiblemente enfadado, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, tachó de “miseria humana” a los autores de los asesinatos tanto de Olivia como de Rocío Caíz, de Martín de la Jara. Moreno afirmó que no encuentra, “por mucho que lo piense ninguna explicación posible” porque “evidentemente no la tiene” para esos actos de “crueldad” para los que hay que ser “un hijo de tal” e insistió en que es algo “tan fuerte” que a uno se le “encoge el alma”.
Según señaló en una entrevista a Efe la nueva fiscal de Sala coordinadora contra Violencia sobre la Mujer, Teresa Peramato, la violencia vicaria no es una enfermedad mental, es “simplemente maldad” y su origen está en el ánimo de dominación, control y posesión del maltratador sobre la mujer que también es madre.
La mayoría de los 39 asesinatos de menores por sus padres o las parejas o ex parejas de sus madres desde 2013 se produjeron tras la separación, el divorcio o el inicio de la mujer de una nueva relación sentimental. Desde el final del estado de alarma se está registrando un repunte de feminicidios: la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género confirmó la naturaleza machista de los asesinatos de nueve mujeres y un menor, más de la mitad de todos los asesinatos perpetrados en el 2021. En lo que va de año, 17 mujeres y dos menores han sido asesinados en crímenes de género.
El buque oceanográfico Ángeles Alvariño continuó ayer la búsqueda en la zona donde el jueves fue hallado el cadáver de la pequeña Olivia, de 6 años, sin que hasta el momento se haya encontrado rastro de su hermana menor, Anna, de 1 año, o de su padre Tomás, que desapareció junto con las menores el pasado 27 de abril tras decidir no entregárselas a la madre.
Después de la confirmación judicial de que el cadáver encontrado el jueves era el de Olivia, los investigadores intentan ahora hallar algún rastro de Anna y de su padre y para ello el Ángeles Alvariño no dejó de rastrear ayer la zona donde el móvil de Tomás hizo su última conexión.
El buque, dotado de un sónar y un robot submarino, está de forma ininterrumpida rastreando una zona que tiene una profundidad de entre 1.000 y 2.000 metros y en principio continuará estos trabajos hasta el lunes aunque, según adelantó el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, la estancia se podría alargar unos días más en función de lo que se pueda encontrar.
Mientras que continúa la investigación supervisada por un juzgado de Güímar, municipio en el que apareció la lancha a la deriva del padre de las niñas, la sociedad canaria expresó ayer su indignación y tristeza por el hallazgo en el fondo del mar del cuerpo de Olivia y aguarda la expectativa de otras noticias que se anticipan también terribles.
Las concentraciones, condolencias, muestras de solidaridad y minutos de silencio se han hecho incontables en España y en Canarias, pero sobre todo en Tenerife, en cuya costa ya se ha hecho habitual ver al Ángeles Alvariño.
Representantes de todas las instituciones, como la reina Letizia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, clamaron ayer contra un crimen machista con el que un hombre ha procurado a su ex mujer el máximo dolor posible, un daño que sienten como propio millones de personas.
El hallazgo del cuerpo de Olivia a mil metros de profundidad, en una bolsa atada a un ancla, causó consternación en la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Santa Cruz de Tenerife que desde hace 45 días busca a las menores y a su padre.
Ya no solo parlamentos, gobiernos, ayuntamientos, cabildos o sindicatos guardaron un minuto de silencio por este crimen machista, sino que también todas las comisarías de la Policía Nacional apoyaron con su silencio a la familia y especialmente a la madre Beatriz, que siempre confió en que el secuestro de las pequeñas acabaría con su regreso sanas y salvas.
El Gobierno de Canarias recibió este crimen como “una muestra de la violencia más cruel y retorcida, la violencia vicaria, la que ejerce un hombre sobre una mujer arrebatándole lo que más quiere: a sus hijas e hijos. Una violencia instrumental en la que se utiliza a menores para causar en la mujer un daño mayor que si la agrediera a ella directamente”.
Según la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, Olivia se suma a una larga lista de menores asesinados por sus padres o por las parejas de sus madres en el marco de la violencia machista: 39 desde 2013.