Las vueltas que da la vida
● El conjunto amarillo puede dar la puntilla a un Espanyol que la pasada temporada desempeñó un papel del todo clave en la permanencia conseguida en la última jornada
El partido entre el Espanyol y el Cádiz Club de Fútbol que se disputa el próximo viernes 21 de abril en Cornellá-El Prat (provincia de Barcelona) trae al recuerdo algo que sucedió en el epílogo de la pasada temporada 2021/22.
El choque que abrirá el telón de la 29ª jornada de Liga aparece como una relevante cita entre dos escuadras que pelean por el mismo objetivo de la permanencia, una más apurada que otra a falta de nueve compromisos para el final del campeonato
En el caso de la que ejerce de anfitriona, el margen de error es nulo al ocupar la penúltima posición en la clasificación con 27 puntos, a tres de la 17ª (Almería con 30) y a cuatro de su adversario, que acredita 31 en la 16ª.
El Cádiz CF puede poner en una situación muy complicada a su oponente si es capaz de llevarse la victoria del RCDE Stadium. En ese caso, llegaría a los 34 puntos y tendría siete de ventaja.
La vida da muchas vueltas hasta el extremo de que el conjunto amarillo puede poner contra las cuerdas al equipo que le salvó del descenso la pasada campaña.
El Espanyol desempeñó un papel muy importante en el feliz desenlace para los de Sergio González tras una sobredosis de sufrimiento.
El cuadro gaditano se presentó al último capítulo del campeonato, el 22 de mayo de 2022, ubicado en la 18ª posición, en zona de descenso, y no dependía de sí mismo para continuar en Primera División.
Tenía que ganar en el campo del ya descendido Deportivo Alavés y que además no lo hicieran o el Mallorca en Pamplona ante el Osasuna o el Granada en casa frente al Espanyol. Tenía que fallar al menos uno de los dos.
El Cádiz CF hizo sus deberes y venció 0-1 en Mendizorroza con gol de Anthony ‘Choco’ Lozano. Pero el Mallorca no falló en El Sadar y ganó (0-2) con facilidad.
El equipo amarillo quedaba entonces en manos de lo que hiciese el Espanyol en el Nuevo Los Cármenes.
El conjunto periquito no se jugaba nada, pero sus jugadores se emplearon con profesionalidad y se tomaron en serio el partido, que finalizó con empate a cero.
El Granada no dio pie con bola, falló un penalti y tiró al poste en los últimos minutos. Los blanquiazules resistieron y se llevaron un punto que fue toda una bendición para los gaditanos.
Esa equis milagrosa del Espanyol en la ciudad de la Alhambra permitió al Cádiz CF seguir en la máxima categoría.
Once meses después de aquel episodio, el contexto es completamente distinto.
Los dos se están jugando la permanencia y los amarillos pueden hundir al equipo que lo rescató del pozo. Cosas de la vida.
Sin el empate de los blanquizules en Granada, los amarillos no se hubiesen salvado