La Policía Nacional libera tres víctimas de explotación laboral
● Se ha detenido al dueño de un negocio de uñas vietnamitas en La Línea que, hace una década, fue arrestado por hechos similares
Agentes de la Policía Nacional han detenido en La Línea de la Concepción a un vietnamita de 51 años como presunto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y han liberado a tres personas, de esta misma nacionalidad, que habían sido captadas por una red dedicada a la explotación laboral que operaba, presuntamente, desde un establecimiento de belleza conocido como “salón de uñas vietnamitas”.
En un comunicado, la Policía Nacional ha explicado que la investigación surgió con motivo de una de las inspecciones que se llevan a cabo de forma rutinaria por la Brigada de Extranjería y Fronteras, donde se constató que las tres personas que se hallaban dentro del local en calidad de trabajadores carecían de contrato laboral y del permiso que las habilita para poder trabajar en España.
Una se encontraba en situación irregular por haber agotado el tiempo máximo de permanencia en España, y los otros dos, en periodo de estancia, llevando en territorio español sólo unos días.
Tras entrevistarse en privado con estas personas, los agentes detectaron que habían sido captadas a través anuncios ofertados en la red social Facebook para venir a trabajar de Vietnam a España, en los que se les ofrecía unas condiciones laborales que distaban mucho de la realidad. Una vez en España, se ven obligadas a aceptar jornadas maratonianas de trabajo, de 9:00 horas a 21:00, careciendo de días de descanso y por un sueldo ínfimo al mes, para así pagar la deuda contraída por su viaje.
A esto se suma la ausencia de contrato laboral legal, lo que supone que estas personas carecen de ningún tipo de protección legal en caso de accidente o percance durante el desarrollo de su jornada, así como estar ajenas al control legal que se realiza por parte de las diferentes administraciones públicas responsables del control de los empresarios sobre los derechos de los trabajadores.
Como resultado de posteriores indagaciones por parte de los investigadores, se comprobó que, además de trabajar en el negocio, estas personas también vivían en el domicilio familiar, donde constan todas ellas empadronadas, según datos proporcionados por el Ayuntamiento de La Línea. Todo ello, ha señalado la Policía, pone de manifiesto la situación de especial vulnerabilidad en la que se encontraban estos trabajadores.
El dueño del negocio, que cuenta por permiso de residencia legal en España, ya había sido detenido por hechos similares hace una década por esta misma Brigada de Extranjería y Fronteras. En aquel entonces, también regentaba un salón de uñas ubicada en la galería comercial de un centro comercial de La Línea.
La investigación forma parte de una de las múltiples inspecciones que se llevan a cabo de forma rutinaria por la Brigada de Extranjería y Fronteras en su labor de perseguir y desmantelar las redes dedicadas a la Trata de Seres Humanos con fines de explotación laboral, explotación sexual, tráfico de personas, inmigración clandestina, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y de los trabajadores y delitos conexos en el ámbito de la extranjería.
Carecían de contrato laboral, hacían jornadas de doce horas y tenían un salario ínfimo