Diario de Cadiz

Traspaso de poderes en la UCA

● El nuevo rector, Casimiro Mantell, culmina su aterrizaje con el acto académico de investidur­a, en el que recibió la medalla y el bastón de manos de Francisco Piniella

- R. C.

Con la entrega del bastón de Francisco Piniella a Casimiro Mantell se escenificó ayer el relevo al frente de la Universida­d de Cádiz. El nuevo rector, que tomó posesión formalment­e el pasado miércoles en Sevilla, fue investido académicam­ente en un acto celebrado en el aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras.

El acto contó con la presencia de las principale­s autoridade­s civiles, militares y académicas de la provincia de Cádiz junto a una numerosa representa­ción de la comunidad universita­ria gaditana. Así, estuvieron los alcaldes de Cádiz, Jerez y Puerto Real; la presidenta Tercera de la mesa del Congreso, Esther Gil; la presidenta de la Diputación, Almudena Martínez; la delegada del gobierno andaluz, Mercedes Colombo; el subdelegad­o de Defensa, Ángel Umbría; el presidente de la Audiencia Provincial, Manuel Estrella; la presidenta de la Autoridad Portuaria, Teófila

Mantell promete “todas las horas de dedicación que haga falta” así como “escucha” y “diálogo”

Martínez; el comandante Naval de Cádiz, Jaime Boloix, o el presidente de la Confederac­ión de Empresario­s, Rafael Sánchez.

Tras hacerle entrega de los atributos de rector –la medalla y el bastón–, el saliente Francisco Piniella ha deseado “a Casimiro Mantell, mi rector, toda la suerte del mundo porque es lo que se merece la Universida­d de Cádiz”. En un breve discurso, ha agradecido a toda la comunidad universita­ria, “sin excepción, el apoyo y el cariño recibido en estos difíciles años”. “He intentado aportar mi trabajo en cuerpo y alma a la institució­n que tanto he amado, sin escatimar tiempo ni esfuerzo”, dijo.

En su primera intervenci­ón como rector, Casimiro Mantell ha reconocido “un profundo sentimient­o de gratitud, combinado con otro no menos intenso de responsabi­lidad”, asegurando que “no hay premio ni responsabi­lidad más alta para un universita­rio” que se rector, comprometi­éndose a “devolverle a mi universida­d trabajo, escucha permanente, actitud de diálogo y todas las horas de dedicación que sean necesarias”.

En el capítulo inicial de agradecimi­entos, Mantell reservó una mención especial para Piniella y su equipo, “porque tomó el timón y en apenas unos meses se vio en mitad de una enorme marejada, una pandemia que midió la fortaleza de nuestra institució­n y la capacidad de esfuerzo y resilienci­a de nuestra comunidad universita­ria al completo”.

Aseguró Mantell que va a ser “el rector de toda la Universida­d de Cádiz, de sus cuatro campus, de sus 17 centros académicos, de sus 9 institutos de investigac­ión, de sus 200 grupos de investigac­ión, pero, sobre todo, seré el rector de las más de 1.900 personas que integran nuestro Personal Docente e Investigad­or, de las casi 900 que forman parte del Personal Técnico de Gestión y de Administra­ción y Servicios y de los más de 21.000 estudiante­s que llenan de vitalidad y sentido a todo lo que hacemos”. “Ellos, los estudiante­s, son nuestro estímulo primero y constante. Para ellos, estamos activando ya nuestras primeras decisiones”, añadió.

Por otra parte, trasladó que la institució­n se adentra “en un tiempo de impulso y de incertidum­bres en donde tendremos que enfrentarn­os a numerosos retos”. Entre ellos, citó “la negociació­n para alcanzar un mapa de titulacion­es universita­rias que conecte nuestra oferta académica con las necesidade­s de formación superior de la sociedad y que especialic­e aún más a nuestra Universida­d”.

“Queremos seguir impulsando, construyen­do y mejorando a la UCA. Más allá de la enseñanza, la sociedad actual espera que nuestra universida­d desempeñe un papel activo en la transferen­cia social, mejorando nuestro entorno de forma significat­iva”, afirmó, consideran­do por tanto que la Universida­d “debe asumir un liderazgo transforma­dor en la provincia, por lo que aspiro a ser rector con una permanente vocación de diálogo, colaboraci­ón y entendimie­nto con todas las institucio­nes, empresas, industrias, asociacion­es y entidades del entorno”.

No se olvidó de las infraestru­cturas el rector, destacando “la situación en que se encuentra nuestra Facultad de Ciencias de la Educación, cuyo edificio necesita una adecuación que garantice la actividad docente e investigad­ora de un centro con una comunidad universita­ria de casi 3.000 personas”; sin olvidar “las necesidade­s de modernizac­ión y mejora de los edificios históricos” del Campus de Cádiz y equipamien­tos hoy inexistent­es en Jerez y Algeciras.

Para todo ello se remitió al plan de infraestru­cturas “que debemos tener consensuad­o con nuestros centros durante estos primeros meses”.

La internacio­nalización, el impulso a la investigac­ión, las reformas legales y normativas o la mejora del empleo fueron otros de los objetivos que marcó en su investidur­a el ya rector de la UCA para los próximos seis años.

 ?? LOURDES DE VICENTE ?? Francisco Piniella aplaude al nuevo rector Casimiro Mantell después de traspasarl­e los atributos propios del cargo, ante el consejero de Universida­d.
LOURDES DE VICENTE Francisco Piniella aplaude al nuevo rector Casimiro Mantell después de traspasarl­e los atributos propios del cargo, ante el consejero de Universida­d.

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