Coro. La piñata. Cádiz
LETRA. José Ramón Peñalver Hoyos, Francisco Manuel Cárdenas Ruso y José Carlos Armario Hita. MÚSICA. José Antonio Montiel Lebrero y Manuel Sánchez Alba el Noly. DIRECCIÓN. José Manuel Pedrosa Rodríguez. EL TIPO. La piñata gaditana. LAS COPLAS. Repertorio de otra época. Tras la explosión de 1947, el coro ‘La piñata gaditana’ le canta un tango al gobernador civil, provocando la vuelta de la fiesta gaditana a las calles. El coro liderado por Antonio Procopio deja un flojo pase que solo se sostiene por el componente histórico. Su desarrollo, las coplas y la interpretación son muy endebles, no haciendo honor a los autores que lo firman. Ya en la presentación, los problemas aparecen al contar de manera simplona y algo vista la vuelta a Cádiz de “la locura de febrero”. Ni el tango consigue salvarse, a pesar de que en algunos pasajes sí tiene el sello característico del Noly. Los constantes cortes y un ritmo excesivamente lento afean una música que no consigue arrancar. Metacarnaval en las dos letras, que no sirven para competir. La primera sí tiene justificación al ser la de medida, con los elementos característicos del Noly para mostrar un tango al que “arlequines y bufones van custodiando su melodía”. Floja la segunda al denunciar la pérdida del clasicismo en el tango, ya que “el show masacra la melodía”. Olvidables los cuatro cuplés, sobre todo la segunda pareja por machistas al hablar de las concejalas de Fiestas y plantear una orgía, aunque al final invitan a Vicente Sánchez. La coherencia les lleva a hablar de feminismo en el popurrí, una pieza con varios destrozos musicales.