Diario de Cadiz

Juan Moreno ‘El Americano’, el torero al que una cornada le salvó la vida

● El torero de Puerto Real fue de los primeros espadas españoles que hicieron campaña en México tras la era de su paisano Bernardo Gaviño ● Retirado, fue juez cambiador de suertes

- Francisco Orgambides

Juan Moreno “El Americano” era de Puerto Real, aunque hay quien lo tiene por isleño y no hemos encontrado su fecha de nacimiento ni segundo apellido. Debió nacer en torno a 1860.

Veinteañer­o llegó a Cuba como cabo de cañón del “Arapiles” donde le apodaban “Aguas mansas ”. En La Habana suplicó al torero Francisco Gómez “El Chiclanero” que lo incorporar­a a su cuadrilla y toreó Moreno en la plaza de Matanzas.

Saltó a México con los primeros toreros españoles y se colocó como sobresalie­nte con su paisano Bernardo Gaviño casi dos años. Formó cuadrilla, se fue a Venezuela y volvió a España. En Cádiz, hizo el paseíllo el 18 de mayo de 1884 en un cartel con Salvador y su hermano Paco Frascuelo. Estoqueó al último toro del encierro de Vicente Romero y estuvo fatal . Volvió a torear en Cuba en 1885 y en México, estando

1887 Alternativ­a. Su doctorado, de manos de Cuatrodedo­s, fue el segundo otorgado en México

con su paisano Gaviño en su agonía tras la cornada de Texcoco en 1886.

El 10 de abril de 1887 inauguró la plaza de toros de El Paseo, en la ciudad de México alternando con Cuatrodedo­s, quien se presentaba y le cedió los trastos haciéndolo matador. Los toros fueron de La Cienaguill­a. Fue la segunda alternativ­a en México tras la que apenas un mes antes le dio Mazzantini en Puebla al gaditano Rebujina. El toro de la ceremonia se llamó Venado.

Hubo poca gente, el sol vacío, pero si que se llenó la sombra atraída por la presentaci­ón del Dedos. Al preparar el toro Cuatrodedo­s para que lo matara el Americano, a quien había brindado la espada, sufrió una cogida que le dejó lastimado de la cara y el juez mandó retirarlo del redondel. El ganado fue bravo y tocó al Americano de alternativ­a matar y dirigir, empresa en la que salió medianamen­te airoso.

El 15 de mayo de 1887, en la plaza Colón y en presencia del presidente Porfirio Díaz toreó de nuevo con Cuatrodedo­s, que era el hombre fuerte del cartel, en la tarde en la que se lidiaban por vez primera toros españoles en México, de Arribas Hermanos y José Moreno.

El antiespaño­l semanario El Monosabio tenía muy buena opinión de él. Al dar la noticia de que volvía a España en 1888 dijo que gozaba de inmensas simpatías en México y que, a diferencia de muchos de los toreros españoles, se distinguía por su modestia y buenos conocimien­tos como torero. Hasta hizo un par de papeles de actor en el teatro Principal de México

El 16 de julio de 1888 toreaba en San Fernando con el isleño Pepete. Volvió a México toreando mucho en Guadalajar­a. Estrenó la plaza de Santa Ana Chiautempa­n y toreó en la última corrida que hubo en la plaza Colón de ciudad de México el 18 de octubre de 1891.

El 20 de mayo de 1894 inauguraba la plaza de Mixcoac y al repetir en el mismo coso el 3 de junio, sufrió una tremenda cogida, temiéndose por su vida. Al día siguiente en coche especial y con toda precaución, fue trasladado a México, a su casa de calle Humboldt 4, donde vivía con su esposa mexicana e hijos y era muy querido.

La cornada descubrió que padecía un tumor en el estómago, por lo que en los primeros días de junio se sometió a una delicada operación de extirpació­n con el doctor Gamboa . El torero salvó la vida y en julio

Al operarse de una cornada en el vientre se descubrió un tumor que fue extirpado a tiempo

mandó a l a prensa una carta de agradecimi­ento a los doctores.

Quedó inútil para la profesión y se le montó una corrida de beneficio en la plaza de la cogida, Mixcoac. La organizó Naranjito, que la torearía con Cheché de la Habana y toros de Santín el 3 de septiembre de ese año. Hubo lleno y antes de la suelta del tercer toro Naranjito y Cheché sacaron a la arena a un emocionado Americano que fue aclamado, recibiendo una lluvia de puros, pesos, billetes y hasta un reloj de oro. El festejo le reportó 600 pesos de beneficio para su familia .

Fuera de la profesión, fue director del cambio de suertes en la plaza de Bucareli en las temporadas de 1895 a 1899, hasta que en agosto de ese último año compró la plaza de San Bartolo Nauacalpam para repararla y ofrecer toros reaparecie­ndo. Se anunció en su plaza y Toluca, donde nos consta que llegó a torear con buen resultado. Ese mes de septiembre salvó a su hija de las llamas al prender una vela la cuna, sufriendo el torero quemaduras.

Tras esa actuación de Toluca no hemos encontrado más actuacione­s del Americano, que en 1905 era director del cambio de suertes en la plaza México, ignorándos­e la fecha de su muerte.

 ?? “LA CATEDRAL Y LOS TOROS” ?? La única imagen que conocemos de Juan Moreno ‘El Americano’, publicada por Ramón Macías Mora.
“LA CATEDRAL Y LOS TOROS” La única imagen que conocemos de Juan Moreno ‘El Americano’, publicada por Ramón Macías Mora.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain