El Pleno permitirá que una calle lleve el nombre de una persona en vida
“Se realizará en casos excepcionales y muy justificados”, asegura la portavoz del Gobierno
El Gobierno municipal del Ayuntamiento de Chiclana llevará al Pleno Ordinario del mes de febrero, que se celebrará el próximo martes 27 a las 9.00 horas, una propuesta para la modificación de la Ordenanza número 27 Reguladora de la Denominación y Rotulación de Calles, Vías y Caminos y de la Identificación de Edificios y Viviendas. Concretamente el apartado en cuestión es el Quinto del Artículo 7, que es el que indica que, en cuanto a los nombres personales, “corresponderán a personas fallecidas tras un tiempo en que se permita valorar la oportunidad y conveniencia”. Así, con la aprobación de la modificación prevista en la sesión, “también podrá nombrarse una calle a una persona aún en vida”, indicó la portavoz del Gobierno Municipal, Ana González.
“Quisiéramos recalcar que estamos hablando de casos excepcionales y muy justificados, con circunstancias especiales motivadas por criterios de historicidad o porque las personas sean notables en distintos ámbitos”, aclaró la concejala, quien comentó que “nos hemos encontrado en varias ocasiones con personas vivas que se merecían este tipo de reconocimiento, pero no lo podíamos hacer precisamente porque la mencionada ordenanza no lo disponía y solo era para personas fallecidas”.
Así, Ana González destacó que, “muchas veces, nos han preguntado por qué no se ponía una calle a una persona en vida y sí lo hacíamos cuando ya había fallecido. Pues bien, ahora con esta modificación, trasladamos a la ciudadanía la posibilidad, en casos excepcionales, de poder nombrar una calle de Chiclana a personas aún en vida”.
Por otro lado, la portavoz del Gobierno anunció que “el Pleno del martes va a contar con numerosos expedientes para su aprobación, entre ellos, el Plan Contra el Cambio Climático y la reversión de una finca cedida a SAFA por parte del Ayuntamiento, además de propuestas de los grupos municipales”.
Hay que recordar que el Ayuntamiento de Chiclana aprobó hace justo una década la Ordenanza reguladora de la denominación y rotulación de calles. El objetivo de esta iniciativa era señalar unos criterios orientativos para la asignación de nombres, evitando la desaparición del nomenclátor que se formó por el uso social, especialmente en el caso del casco histórico de la ciudad. Ahora, diez años después, se ha visto necesario realizar esta modificación, por lo que la ordenanza volvera a pasar por el salon de plenos del Ayuntamiento chiclanero.