IN MEMORIAM. MIGUEL ÁNGEL LOSADA
LA vida quiso que fuéramos compañeros de curso en la Universidad Politécnica de Madrid. Terminamos en junio de 1970. Tú, como nieto de maestro e hijo de catedrático, te fuiste a la Universidad de Cantabria, y yo me vine a Andalucía a una empresa constructora.
Treinta años después, el destino nos volvió a juntar, tú ya como catedrático de la Universidad de Granada y director del CEAMA (Centro Andaluz de Medio Ambiente) y yo en el Puerto de la Bahía de Cádiz. Recurrimos a ti ante una demanda de la Dirección General de Costas para que nos realizaras un “análisis del entorno de la desembocadura del río San Pedro” y su repercusión en las instalaciones portuarias en la Cabezuela.
Iniciamos entonces una relación profesional, que trascendió luego a lo personal, en la que volvimos a contar con tus conocimientos para que estudiaras la optimización de instalaciones náuticas deportivas y los problemas de aterramiento en la desembocadura del río Guadalete en El Puerto.
Recuerdo el clarificador trabajo sobre la interconexión de la bahía externa e interna de Cádiz y el papel fundamental del estrecho de Puntales.
Tuviste la generosidad de sumarte al encierro de un fin de semana en las instalaciones secuestradas de Puerto Sherry con el comité de dirección de la APBC, en el que tratamos de fijar el rumbo del Puerto de la Bahía de Cádiz a medio y largo plazo y del que nació la necesidad de estudiar las posibles alternativas de una necesaria nueva terminal de contenedores. Después de evaluar con diez criterios técnicos y económicos elegimos la mejor ubicación.
Recuerdo también un encuentro en tu casa de Motril con el presidente de APEMAR (Asociación Profesional de Empresas de Actividades Marítimas de la provincia de Cádiz), donde clarificaste las conclusiones del encierro anterior.
Gracias Maestro de maestros, gracias Premio Nacional de Ingeniería Civil 2018, gracias Premio Periodístico 1987, gracias Medalla de Honor de nuestro Colegio, gracias Premio Universidad de Granada a la Divulgación Científica, gracias Premio Aguas de Mayo, Ecologistas en Acción, gracias Premio Andalucía de Investigación, gracias Grupos de trabajo del CEAMA, gracias querido amigo MAL (Miguel Ángel Losada). Este “pequeño gran puerto”, como tú definiste en alguna ocasión al Puerto de la Bahía de Cádiz, siempre te agradecerá los estudios científicos para su ampliación sobre superficie, dragado, recursos vivos, interacción con la bahía interna, playas, impacto visual, impacto sobre flora y fauna, patrimonio histórico, impacto generación empleos, y el estudio final de las obras de ampliación sobre la circulación y el transporte de sedimentos en la Bahía.
Aunque mucho más importante que todos estos estudios, ha sido, sin duda, tu currículum personal, tu entrega constante, tu implicación, tu generosidad, tu rigor, tu bondad, tu humildad y tu vocación por la sostenibilidad, de la que fuiste un precursor, antes de que se convirtiera en norma y por la que debemos estarte todos eternamente agradecidos.
Siempre te recordaré, amigo.