“Este pregón será de despedida, mientras que el de hace 25 años fue de presentación”
● El conocido cofrade portuense pronunciará hoy en el teatro municipal Pedro Muñoz Seca su segunda exaltación de la Semana Santa, al cumplirse las bodas de plata de la primera
El telón del teatro municipal Pedro Muñoz Seca se levanta este mediodía para dejar paso al Pregón de la Semana Santa de El Puerto, que por segunda vez pronunciará José Manuel Castilla Osorio, con motivo de cumplirse las bodas de plata del Pregón que ofreciera en 1999.
Es hermano del Nazareno y El Olivo, hermandad esta última en la que cumple 50 años como hermano, y es miembro además del Apostolado de la Oración. Ha sido durante más de diez años presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, a cuya permanente sigue perteneciendo.
-Se cumplen 25 años desde su primer pregón de la Semana Santa de El Puerto. ¿Qué recuerda de aquella experiencia? -Aquello fue muy bonito. Yo tenía entonces poco más de 30 años, con toda la vida por delante tanto a nivel personal como en el ámbito de las hermandades. Por aquel entonces además poca gente de El Puerto pronunciaba el Pregón de Semana Santa. Fue algo muy ilusionante, aunque tenía mucho miedo porque hasta entonces tampoco había hecho yo grandes cosas en lo referente a pregones. Fue Adolfo Ortega el que me convenció.
-Es usted uno de los pocos privilegiados que va a poder pregonar
La Semana Santa de este año será recordada en El Puerto por las numerosas novedades que se han sumado, tanto en lo referente a la creación de nuevas entidades como a los cambios que se han introducido en los templos de salida de algunas hermandades, así como en los horarios. Ya hace dos años la Semana Mayor portuense experimentó un gran cambio con la desaparición de la Madrugada, al decidir la hermandad del Nazareno adelantar su horario de salida para evitar algunos problemas que se habían dado en los últimos años, con su paso por zonas de ocio en las que el ambiente no era el apropiado para una estación de penitencia llena de recogimiento, como era antiguamente. También el Nazareno adelanta este año aún más su salida y la realizará desde su nueva Casa de Hermandad, en la calle La Palma, aunque se recogerá en la Basílica. A este cambio hay que sumar este año el cambio de templo de la hermandad de los Afligidos, que debido a las obras de consolidación que se acometen en la capilla del antiguo hospital San Juan de Dios tendrá que salir desde la Basílica Menor de los Milagros, de manera que los portuenses se quedarán este año sin contemplar la complicada maniobra que los costaleros tienen que hacer cada Lunes Santo para atravesar el dintel de la puerta de la angosta capilla. Es la segunda hermandad que tiene que trasladarse de templo debido al mal estado del mismo, como ya ocurrió en 2015 con el cierre de la Capilla de la Aurora, sede canónica de la hermandad de la Humildad y Paciencia, que aún sigue acogida en la iglesia del convento del Espíritu Santo. También adelantará su horario de salida la hermandad de La Flagelación, que lo hará este año a las cinco de la tarde desde la parroquia de San Joaquín. dos veces su Semana Mayor. ¿Qué sintió cuando se lo propuso el Consejo de Hermandades?
- Sí, hemos sido solo cuatro pregoneros los que hemos tenido ese honor. En un primer momento no me lo creía, pensaba que era una broma. Fue pasando el tiempo y de tanto en tanto Juan José Caballero me dejaba caer alguna indirecta, hasta que ya el pasado mes de septiembre me lo propuso formalmente y acepté. Es algo muy especial.
-Conoce usted muy bien la Semana Santa portuense, no en vano fue durante muchos años presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías. ¿Cómo ve a las hermandades locales? ¿Hay suficiente apoyo por parte municipal para el realce de la Semana Santa? -Fui presidente del Consejo más de diez años, porque además ya al final me tocó la etapa de la pandemia y no se pudo realizar el traspaso hasta dos años después. El apoyo a las hermandades siempre ha sido más o menos el mismo, yo recuerdo de algunos años, hace tiempo, en los que había que quitar los coches del recorrido, y eso ya no pasa. Hay apoyo, aunque quizás se podría ayudar más. Las hermandades sí tienen mucha vida, sobre todo están cogiendo gran fuerza los grupos jóvenes. Han sido un éxito el pregón de
la juventud cofrade y la presentación del cartel, y hay muchas ganas y mucha fuerza.
-Se han anunciado algunos cambios, la mayoría estéticos, en la Carrera Oficial. ¿Cree que habría que acometer cambios más profundos?
-Cambiar la Carrera Oficial en El Puerto es muy complicado, no hay espacio para hacerlo. Tuvimos la experiencia de la Plaza del Castillo, que no llegó a cuajar, y la Plaza de España tampoco es el sitio idóneo, pero no hay un espacio alternativo. Este año se han ampliado las sillas y palcos porque hay una gran demanda y se van a renovar los reposteros, y ya de cara al año que viene queremos contratar a una empresa especializada que monte la Carrera Oficial.
-Esta Semana Santa El Puerto cuenta ya con una nueva hermandad, la del Prendimiento. ¿Podemos estar ante una próxima eclosión de nuevas hermandades, como ya ocurrió en la segunda mitad del siglo XX?
-Sí, y hay una nueva agrupación parroquial, la del Beso de Judas. En aquella época en El Puerto había muy pocas hermandades, que eran las que habían perdurado históricamente. La última fue el Resucitado hace 25 años y ahora tenemos el Prendimiento. El Puerto es muy complicado para la creación de nuevas hermandades, entre otras cosas porque tampoco hay muchos templos. Hay movimientos pero hay que tener un apoyo, un número de miembros, y cuesta mucho trabajo. A la falta de templos se suma el cierre de algunas capillas como ocurrió con la de la Aurora, o ahora con la del antiguo hospital San Juan de Dios, y en la Basílica ya no hay espacio.
-La próxima Semana Santa habrá dos procesiones el Lunes
Santo, por primera vez en El Puerto. ¿Cómo se plantea?
-Cada hermandad saldrá de su ubicación, aunque Afligidos estará aún un tiempo fuera de su capilla. El Prendimiento tiene su sede canónica en el Convento del Espíritu Santo y será una jornada de más contraste en la calle, con el silencio de una y la música de la otra.
-Este año la Semana Santa viene con importantes novedades, como el cierre por obras de la capilla de los Afligidos. Este cierre se suma al de la Capilla de la Aurora. ¿Por qué no se mantiene con más mimo el Patrimonio religioso?
-Hay que entender que el patrimonio de la iglesia es un patrimonio de todos, porque todos lo disfrutamos. Es algo que no se suele tomar en serio, los portuenses no nos implicamos, pero es un patrimonio muy costoso de mantener. Las administraciones también tienen que implicarse para tomar la iniciativa, como está ocurriendo en el caso de la Capilla del Hospital, que es de propiedad municipal, y colaborar cuando se trata de propiedades de la iglesia. El Obispado no tiene suficiente presupuesto para mantener todas las iglesias de la diócesis. Siempre con buena voluntad se pueden ir haciendo cosas.
-También en una de sus hermandades, la del Nazareno, llegan nuevos cambios. Tras decir adiós a la Madrugada, ahora se adelanta la salida y se inicia la procesión en la Casa de Hermandad. ¿Cree que son cambios bien acogidos por los cofrades?
-Hay de todo. Para mi es una pena que se haya perdido la Madrugada, entiendo el planteamiento pero no lo comparto. Los tiempos cambian y se ha considerado oportuno hacer estos cambios, aunque el Nazareno de hoy no tiene nada que ver con el de hace 25 años, es otra cofradía distinta.
-Hábleme de su Pregón. ¿Qué líneas generales seguirá, si puede desvelar algo?
-Será una continuación del Pregón del 99, aunque aquel fue de llegada y este es ya de despedida. El primero fue más dirigido a las distintas advocaciones de Cristo, y este va a ser más mariano, recoge más la figura de María en sus distintas advocaciones. Habrá pasajes de nostalgia, de añoranza, de relación del cofrade con los titulares, estará dirigido al pueblo. Me ha costado hacerlo más que el otro, y al final decidí recuperar algunos pasajes que ya había escrito, porque siguen estando vigentes. Yo después de aquel primer pregón ya apenas pronuncié ninguno más, salvo dos compromisos, pero hace una década que no hago ninguna exaltación. Algunas palabras serán las mismas pero con otra luz.
-¿Está más nervioso esta vez o la primera?
-Esta vez estoy muchísimo más nervioso. Antes era ya conocido en el mundo de las cofradías, pero desde entonces he tenido una larga trayectoria y noto una mayor presión, hay mucha gente que tiene depositada mucha confianza en mi. Hay un gran interés y están volando las invitaciones, aunque dejaremos alrededor de un centenar disponibles para que las personas que no hayan podido recogerlas puedan acudir en el último momento.
Esta vez estoy muchísimo más nervioso, hay gente que tiene depositada mucha confianza en mí”