Un sábado con poco ambiente en el centro
Parece que los llamamientos a la ciudadanía a salir lo menos posible tanto de Mamen Sánchez, alcaldesa de Jerez, como de Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, han calado entre la población o al menos eso parece a tenor del ambiente que registró ayer el centro de la ciudad, con muchísima menos gente que en sábados anteriores, situación que fue ampliamente comentada entre los hosteleros.
En efecto, ayer hubo mucha menos gente y poco ambiente a partir de las dos de la tarde, cuando tradicionalmente las terrazas se llenan en las jornadas sabatinas. Cierto es que hubo establecimientos con bastantes clientes, pero la mayoría tenía las mesas vacías a una hora que suelen estar ocupadas.
Y es que la situación de la pandemia en Jerez, una vez superada la tasa de mil contagios acumulados por cada 100.000 habitantes, y la petición de autoconfinamiento voluntario y que se salga de casa lo menos posible por parte de las autoridades ha restado afluencia al centro, habitualmente mucho más ambientado los sábados a media tarde.
Mamen Sánchez hacía el pasado viernes un llamamiento a la ciudadanía a extremar las precauciones y salir lo menos posible este fin de semana, además de anunciar un refuerzo policial para evitar cualquier tipo de aglomeración o situaciones que conlleven mayor riesgo de contagio: “Este fin de semana, que se intente salir lo menos posible de casa, que se tomen todas las precauciones. Por favor, vamos a intentar tomar este fin de semana como un confinamiento, y vamos a intentar hasta que la Junta adopte las medidas, tener nuestra propia autoprotección y responsabilidad individual de cada uno”, pidió la alcaldesa.
Días atrás era Juanma Moreno, presidente de la Junta, el que apelaba a la “responsabilidad” de los ciudadanos ante el avance “explosivo” de la tercera ola de la pandemia y pidió a los andaluces “quedarse en casa en la medida de sus posibilidades”; e intentar “no multiplicar reuniones sociales no necesarias” ni trasladar a los hogares los encuentros con amigos o familiares no convivientes.
Moreno alertaba sobre la necesidad de no convertir las casas en “minirestaurantes” donde reunirse con amigos o familiares no convivientes y advirtió de que ni la Junta ni ninguna administración puede “estar en las casas ni en fiestas clandestinas”.