Los servicios de las funerarias han aumentado un 40% en este invierno
Las empresas que gestionan los fallecimientos llevan un año en una montaña rusa, con un primer auge al inicio de la pandemia, muy poca actividad en verano y trabajo a destajo en enero
Con muchísimo trabajo a diario pero para nada desbordadas. Así dicen sentirse la mayoría de las empresas funerarias que operan en la provincia de Cádiz y que en el presente invierno han visto incrementar sus servicios hasta en un 40% con respecto a años anteriores debido a la trágica incidencia que está teniendo esta tercera ola de la pandemia del coronavirus.
Lo que está sucediendo en estos meses, sobre todo en enero, no ha hecho sino acrecentar la sensación de que el sector de las funerarias lleva un año en una montaña rusa. Y es que sus servicios se incrementaron de manera notable con el estallido de la pandemia allá por el mes de marzo
Pese al intenso trabajo las empresas del sector que operan en Cádiz no se sienten desbordadas
del año pasado –y además teniendo que aplicar cambios constantes en el protocolo de traslado de fallecidos y en los velatorios–, vieron luego descender su actividad de manera brusca a lo largo del verano, y ahora han repuntado con una fuerza inusitada al aumentar de manera considerable el número de muertes debido a la incidencia del virus. Y de las comarcas de la provincia alertan de que es en el Campo de Gibraltar donde han advertido un mayor incremento de defunciones.
Es verdad que el invierno es siempre la época del año en la que más suben las cifras de víctimas mortales. El frío suele provocar enfriamientos, resfriados y neumonías que todos los años se ceban con aquella parte de la sociedad que tiene más problemas respiratorios. No obstante, empresas del sector consultadas por este periódico reconocen que la actividad que están teniendo este invierno, y en especial en este mes de enero, muy poco tiene que ver con ejercicios anteriores.
En efecto, el incremento de los servicios fúnebres en un 40% en este invierno es una subida exponencial muy llamativa cuando, por ejemplo, el año 2020 en su totalidad trajo un alza de un 10% en el global de estos servicios realizados en la provincia de Cádiz.
Pero pese a este intenso trabajo estas empresas quieren dejar claro que no se sienten desbordadas. El mejor ejemplo de ello es que casi ninguna se ha visto obligada aumentar su personal. Y la mayoría de ellas, sobre todo las empresas grandes, tampoco han precisado para este invierno de un acopio especial de ataúdes o material para sus trabajadores.
Otras empresas pequeñas que también desarrollan su labor en
comarcas determinadas de la provincia gaditana sí reconocen que en los primeros meses de la pandemia, cuando se inició todo, sí se quedaron desprovistas de sudarios, ropa para su personal, EPIs, etc., y se vieron obligadas a comprarlo a un precio mucho más elevado de lo que es normal. Ahora, sin embargo, todo parece más controlado.
Del balance del año pasado hay empresas del sector que destacan el descenso en el número de decesos que hubo en verano en la provincia. Normalmente los picos de calor también suelen conllevar más defunciones, pero eso se dio mucho menos en la temporada estival de 2020. Además, las restricciones en la movilidad, el descenso de accidentes de tráfico y la caída del turismo fueron algunos elementos que también terminarían influyendo en ese descenso de la mortalidad que hubo el pasado verano.
En la actualidad, y con un trabajo que realizan a destajo, las empresas fúnebres de la provincia reconocen que no saben a ciencia cierta lo que les tiene preparado el futuro a corto y a medio plazo. Y es que este sector mantiene un contacto estrecho con las diferentes administraciones sanitarias y con los hospitales de la zona, y todos estos interlocutores coinciden al afirmar que no saben aún si el pico de esta tercera ola está cerca o si la tendencia en los contagios –y también en los fallecimientos– se mantendrá al alza varias semanas más.