La dura caída tras el 2019
● La provincia estaba en pleno crecimiento, con récord de turistas y de pernoctaciones, antes del parón provocado por la pandemia
Los hoteles de la provincia cerraron 2019 con un récord de clientes, 2.778.469, y de pernoctaciones, 8.030.659. Se había dejado atrás los duros y largos años de la crisis económica iniciada en 2008. Cádiz comenzaba a tener un papel relevante en el turismo en España, con cifras que nos acercaban a las provincia de referencia del país. La costa y Jerez se asentaban como grandes polos de atracción, a los que se unió con fuerza la capital gaditana, especialmente gracias tras ser descubierta por la prensa internacional de más prestigio.
El inicio de 2020 auguraba otra gran año, incluso se pensaba superar al 2019. Hasta el aeropuerto de Jerez comenzaba a remontar en vuelos y en pasajeros, mientras que los indicadores de calidad reflejados en las encuestas mensuales de la Junta mejoraban de forma sustancial en el conjunto de la provincia.
Tal estado de cosas, tan importante para una de las patas de la economía provincial, se rompió de forma abrupta a mediados de marzo de 2020. La pandemia de coronavirus cerró nuestras fronteras al turismo, nos metió en casa, clausuró la oferta hotelera y redujo al mínimo la hostelería.
Paso en todo España, cierto, pero aquí, con un sector industrial siempre tambaleante, el turismo tiene cada vez más fuerza en nuestro PIB provincial.
Los datos del nefasto 2020 son elocuentes. Se cerró el ejercicio con apenas 1.146.690 usuarios hoteleros. Un 59% menos que el año anterior. El turismo internacional se hundió, pues las fronteras han permanecido cerradas durante buena parte del ejercicio o se han impuesto limitaciones sanitarias muy estrictas en los países de origen de nuestros visitantes que han desanimado a viajar. Un 81%.
El turismo nacional repuntó tras la desescalada después de la primera ola de la enfermedad. Cádiz se situó incluso en junio y julio entre las tres primeras provincias en visitantes de todo el país, en una etapa en la que la tasa de incidencia de contagios en el sur era mínima. Al final del año el descenso fue del 46,6%.
Las pernoctaciones, una dato que para el sector muestra la fuerza del turismo, pasó del récord de los 8 millones en 2019 a apenas 2,8 millones en 2020. Una cifra que se había dejado atrás hace más de una década.
Los hosteleros confiaban en que todo iba a mejorar en 2021. Que la rápida llegada de las vacunas iba a normalizar la situación no sólo en el verano sino incluso antes.
La dureza de la tercera ola, incluso en provincias como la gaditana, desbarató cualquier previsión positiva. Lo cierto es que la situación ya apuntaba mal cuando en octubre de 2020 cerraron sus puertas hoteles que siempre habían permanecido en funcionamiento tras la temporada estival, entre ellos el histórico Hotel Playa Victoria de la capital, que anuncia para este jueves su esperada reapertura.
En los dos primeros meses de este año el acumulado de usuarios de los hoteles apenas ha llegado a 59.230 personas, con un descenso respecto a 2020 del 80,23%, que sube nueve puntos más si atendemos al turismo internacional. En esta fecha estaban en funcionamiento 235 hoteles, frente a los 352 de un año antes. El empleo entonces era de 3.132 trabajadores hasta caer a los apenas 1.057 del pasado febrero.
Tras perder la campaña de la Semana Santa sólo cabe recuperar algo el verano entrante.