La presión internacional fuerza el traslado del opositor ruso Navalni a un hospital
● Los aliados del preso, que se encuentra en huelga de hambre desde hace 20 días, aseguran que su vida “pende de un hilo”
El líder opositor ruso Alexei Navalni, en huelga de hambre en prisión desde hace 20 días, fue ingresado en un hospital penitenciario tras afirmar sus aliados que su vida “pende de un hilo” y tras las presiones internacionales ejercidas sobre el Kremlin.
Una comisión de médicos del Servicio Federal Penitenciario “decidió trasladar a A. Navalni a un hospital para reclusos, en la región de Vladimir”, a unos 200 kilómetros de Moscú, indicaron ayer las autoridades penitenciarias en un escueto comunicado.
Según explicó en un tuit Leonid Volkov, estrecho colaborador del opositor, éste fue trasladado el domingo al hospital penitenciario sin que fuera avisada su familia.
En ese hospital, que se encuentra en la misma región que la prisión en la que cumple una condena de dos años y medio de cárcel por un antiguo caso penal, el líder opositor será examinado por un médico general cada día y recibirá “con su consentimiento” un tratamiento con vitaminas, de acuerdo con las autoridades.
Su equipo afirmó ayer que la condición médica de Navalni “se ha deteriorado tanto que incluso la Administración reconoce la necesidad de hospitalización”, aunque ayer mismo las autoridades penitenciarias reiteraron que su estado de saludo es “satisfactorio”.
Alexei Liptser, uno de los abogados de Navalni, pudo verle ayer, pero “sólo unos minutos”.
En declaraciones a la prensa en el exterior de la cárcel donde está el hospital, el letrado dijo que un funcionario notificó ayer a Navalni que la “exigencia de que llamaran a un médico para ser examinado no puede ser satisfecha por las leyes”. “Esto no propicia la solución de esta situación. Nada impide que le lleven a un especialista (...)”, señaló.
Navalni lleva casi tres semanas en huelga de hambre para exigir que le permitan ver a sus médicos de confianza. Tiene una doble hernia y una protusión discal, y ha adelgazado 16 kilos desde que ingresó
Las autoridades penitenciarias reiteran que su estado de salud es “satisfactorio”
en prisión en febrero y 9 desde que se negó a ingerir comida.
Las autoridades penitenciarias, pese a reiterar que el estado de salud de Navalni es satisfactorio, han decidido ingresarle 48 horas después de que las presiones internacionales aumentaran considerablemente.
El sábado, el presidente de EEUU, Joe Biden, calificó de “totalmente injusta” la situación de Navalni, en tanto que el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, advirtió el domingo de que habrá consecuencias si el opositor muere.
La UE volvió a exigir el domingo la liberación de inmediata e incondicional de Navalni y ayer el alto representante para la Política Exterior, Josep Borrell, insistió en que las autoridades rusas permitan “acceso inmediato” a un médico de su confianza.