La plaza de Leitza será para los peatones a partir del 22 de junio
Es parte de las medidas que el Ayuntamiento está llevando a cabo en torno a la movilidad
LEITZA – A partir del 22 de junio la plaza de Leitza se cerrará al tráfico rodado, como un nuevo paso del Ayuntamiento de esta localidad en el marco de las medidas en torno a la movilidad que está llevando a cabo desde mayo. Así, los viandantes contarán con un nuevo espacio, el único peatonal por ahora. Y es que la medida forma parte de un plan más ambicioso que el Consistorio pretende llevar a cabo los próximo años “poco a poco” para avanzar en la accesibilidad y la seguridad de las calles de Leitza, como señala el alcalde, Mikel Zabaleta.
El grupo de la alcaldía, EH Bildu, realizó un estudio sobre lugares del núcleo urbano libres de vehículos, empezando por la plaza, el centro neurálgico de la vida social, cultural y deportiva de Leitza, que a partir de la próxima semana será más amable y segura, sobre todo para los txikis y para tranquilidad de sus cuidadores. Hasta la fecha, la plaza se cerraba al tráfico desde l viernes, día de mercado, hasta el lunes.
Consciente de los impedimentos que pudieren surgir con la peatonalización de la plaza, el Ayuntamiento se reunió con los vecinos de la zona y empresas de servicios para compartir preocupaciones, propuestas o quejas. El alcalde confía en que las medidas que se están tomando redunden en la disminución del tráfico en Leitza y una mayor tendencia a acudir andando o en bicicleta a los diferentes lugares y pone el foco en la importancia de la concienciación de la población.
Por otro lado, recuerda que se están realizando diferentes actuaciones para la supresión de barreras arquitectónicas en diferentes puntos así como nuevas aceras además de otras medidas para solucionar los problemas de tráfico existentes, sobre todo relacionados con el estacionamiento de vehículos en lugares que a menudo representan un peligro. Por ello, el Ayuntamiento comenzará a colocar avisos en los coches mal estacionados, advertencias que después serán sanciones según su reincidencia y el peligro que generen. Para ello se deberá modificar la ordenanza municipal para establecer las sanciones y también bonificaciones que serán de hasta el 90%.
“Queremos corregir costumbres inadecuadas. Las sanciones son complementarias a toda la labor de concienciación que se está realizando desde diferentes sectores del pueblo. Hay situaciones que están normalizadas y no somos conscientes del peligro que suponen”, destaca el alcalde. “No querríamos lamentarnos tardíamente de una desgracia que se pudiera evitar habiendo actuado a tiempo. Es un trabajo complejo que nos atañe a todos y todas las leitzarras pero que se debe acometer desde ahora”.