Como los grandes

En el 93, tras remontar dos goles y con uno menos. Ah! Y de un balón de Rubén desde la portería. Osasuna ganó ayer como los grandes, cuando pocos lo esperaban y con una genialidad. Y lo fue ya que Rubén Martínez le mandó un buen balón al otro Rubén, García. Este no estaba haciendo un partido muy lucido, pero entonces se aprovechó del error del defensa para meterle un taconazo a Torres que, con la tranquilidad que solo tienen los muy buenos, cerró la mala racha sin ganar fuera de casa.

Lo dijo David Rodríguez al finalizar el encuentro. “Los equipos que tienen grandes jugadores pueden marcar gol en cualquier momento”. Y eso es lo que pasó. Fue un encuentro raro, con goles de rebotes, un penalti, como mínimo, muy dudoso, una expulsión que no era (la segunda amarilla, visto el precedente del delantero del Málaga, será retirada por el Comité ya que Aridane ni toca al rival) y un rival tan complicado arriba como endeble atrás. Entonces, cuando casi se firmaba el empate, llegó la genialidad de Rubén y Torres. Es lo que tiene que los buenos jueguen en tu equipo.

Como buen encuentro extraño, a Osasuna se le complicó mucho más de lo debido. Un rebote de Fausto Tienza y el penalti colocaron el 2-0 en el marcador.

Pero fue fundamental que Osasuna se repuso del segundo mazazo al momento

Rubén y Roberto Torres acabaron con la racha fuera de casa con un gol en el 93 en un partido muy extraño y lanzan al equipo hacia arriba