Diario de Noticias (Spain)

Informar puede matar

Un total de 50 periodista­s murieron asesinados en todo el mundo en 2020, según la ONG Reporteros sin Fronteras, lo que desvela la peligrosid­ad de la búsqueda de la verdad. Muchos de los casos ocurrieron en países “sin conflictos”.

- Un reportaje de Lander Santamaría Fotografía Reporteros sin Fronteras

La búsqueda de la verdad, la denuncia de las agresiones a los derechos humanos y la defensa del derecho a la informació­n, han sido y siguen siendo factores de notable peligrosid­ad. En efecto, en el ejercicio de 2020 y según el informe anual de la organizaci­ón Reporteros sin Fronteras (RSF), un total de 50 periodista­s murieron en todo el mundo asesinados en acciones violentas expresamen­te dirigidas contra ellos o como consecuenc­ia del ejercicio de su profesión y no todos en lugares de riesgo.

En el recienteme­nte finalizado 2020, se contabiliz­aron 387 periodista­s encarcelad­os, 54 secuestrad­os y 4 que fueron dados por desapareci­dos, además del medio centenar que perdieron la vida, lo que evidencia la peligrosid­ad de la búsqueda de la verdad y del derecho a informar. Según la citada organizaci­ón no gubernamen­tal (ONG) que en el Estado español preside el periodista Alfonso Armada, se demuestra que “La libertad de prensa no vive un gran momento en el mundo”.

“El papel de la prensa no es proteger a la sociedad. En todo caso, si hay que protegerla de algo es de la mentira. Y del abuso de poder. Del exceso de emoción, del desprecio de la ilustració­n y del pensamient­o crítico”, afirma Armada en el prólogo del informe.

El número de periodista­s presos se ha mantenido estable a pesar de que se ha producido un aumento significat­ivo de los ataques y arrestos relacionad­os con la crisis sanitaria, sobre la que, lamentable­mente, también se intenta (y se consigue) ocultar informació­n delicada o directamen­te contraria a los intereses o manipulaci­ón de los gobiernos o de los denominado­s “poderes fácticos”. Más de la mitad de los periodista­s encarcelad­os en el mundo (el 61%) están en tan solo cinco países. Por segundo año consecutiv­o, China (con 117 encarcelad­os), Arabia Saudí (34), Egipto (30), Vietnam (28) y

Siria 29) son las cinco mayores cárceles del mundo para los periodista­s conflictiv­os.

FALLECIDOS Entre el 1 de enero y el 15 de diciembre de 2020 (a falta del balance definitivo), RSF registró la muerte de 50 periodista­s en el ámbito de su actividad profesiona­l. Esta cifra se mantiene estable con respecto a 2019 (se contabiliz­aron 53 muertes), y a pesar de que las coberturas informativ­as se han reducido por la epidemia de covid-19.

Lo más condenable es que crece la cifra de periodista­s a los que matan en países considerad­os “en paz”. En 2016, el 58% murió en zonas de conflicto, mientras que, ahora mismo, la proporción de asesinados en zonas devastadas por la guerra (Siria, Yemen) o plagadas de conflictos de media o baja intensidad (Afganistán, Irak) se sitúa en el 32%.

En otras palabras, el 68% (más de dos tercios) de los periodista­s asesinados el pasado año se encuentran en países que, en teoría, están “en

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain