Induráin dice que la vacunación de crónicos sigue la línea de Sanidad
Geroa Bai reclama que se priorice a estos pacientes por su mayor riesgo de cuadros graves de covid
PAMPLONA – La consejera de Salud, Santos Induráin, apoyó ayer la estrategia general de vacunación contra la covid-19 también en lo referente a enfermos crónicos, que defendió que va en la línea marcada por el Ministerio de Sanidad. Según apuntó ayer en el pleno del Parlamento a preguntas de Geroa Bai –que reclama priorizar a estos pacientes–, Navarra “ha compartido o discrepado” del Ministerio u otras comunidades según los asuntos pero es partidaria de llegar a acuerdos de mínimos para evitar “agravios e incoherencias”. En este sentido, detalló que la postura de Navarra en la vacunación de enfermos crónicos “es coincidente con la estrategia general y su filosofía”.
Cabe recordar que, ahora, los menores de 60 años con enfermedades crónicas son el grupo 7 dentro de la estrategia de vacunación para las dosis de Pfizer y Moderna. En este sentido, Induráin expuso que los pacientes crónicos son tenidos en cuenta desde dos ámbitos, por un lado, desde la priorización de los grupos de edad, y por otro lado desde la creación de un grupo específico de crónicos que sean menores de 60 años.
Por su parte, la parlamentaria de Geroa Bai Ana Ansa pidió a Salud que priorice al colectivo de pacientes con enfermedades crónicas. Ansa preguntó al Gobierno por este tema y mostró “cierta extrañeza y preocupación porque los enfermos crónicos no han sido contemplados como grupos más prioritarios en la vacunación”. En este sentido, consideró “difícil de entender” que enfermos de cáncer, EPOC, obesidad severa o enfermedad mental, entre otros, no sean prioritarios cuando hay “evidencia científica” del mayor riesgo que tienen de contrae la covid y de tener un estado más grave o morir si la contraen.
RIFIRRAFE POR LAS DOSIS Por otra parte, el portavoz de Navarra Suma, Javier Esparza, tildó ayer de “negligente” la gestión de la vacunación y cuestionó el menor número de vacunas administradas el fin de semana. En respuesta, Induráin detalló que se pusieron el 89% de las dosis disponibles y que el descenso “está relacionado con la necesidad de organizar citas y listados de un heterogéneo bloque de sanitarios y profesionales esenciales.