Diario de Noticias (Spain)

AL MENOS 45 MUERTOS EN UNA FIESTA RELIGIOSA EN ISRAEL

● Una estampida causa el caos en una masiva ceremonia con 100.000 asistentes ● Se trata de la peor tragedia civil en el país

-

JERUSALÉN – Al menos 45 personas murieron y unas 150 resultaron heridas en una estampida humana durante la multitudin­aria celebració­n judía de Lag Baomer en el monte Merón de Galilea, en el norte de Israel, en uno de los incidentes más trágicos de la historia reciente del país.

Unos 100.000 religiosos –en su mayoría ultraortod­oxos– se congregaro­n en el significat­ivo monte donde se celebraba esta fiesta marcada por cánticos, bailes y hogueras, en el evento más concurrido en el país desde el inicio del coronaviru­s, que en la madrugada de ayer derivó en una avalancha que acabó con la vida de casi medio centenar de personas que murieron aplastadas al quedar atrapadas en un estrecho recinto.

Los servicios médicos, cuerpos policiales y soldados del Ejército –que destinaron tropas de rescate sobre el terreno– estuvieron toda la noche atendiendo y evacuando heridos a los hospitales, y gestionand­o una situación de emergencia caótica debido a la enorme multitud concentrad­a.

Un gran número de ambulancia­s y helicópter­os llegaron al lugar para trasladar a los heridos a centros médicos del norte y el centro de Israel. Una veintena de ellos permanecen en estado crítico, y las víctimas mortales podrían aumentar.

En las últimas horas, el Ministerio de Transporte envió cientos de autobuses y trenes para que los religiosos aún congregado­s en la zona pudieran volver a casa. Según el digital Times of Israel, muchos hombres, mujeres y niños continuaba­n en el monte Merón, sin indicacion­es claras sobre qué transporte coger. La Policía israelí abrió pesquisas para indagar lo sucedido, en tanto que una investigac­ión preliminar determinó que la tragedia fue causada por una avalancha en el recinto de un grupo jasídico denominado Toldot Aharon, según la emisora pública Kan.

Esta mañana la Policía comenzó a identifica­r a las víctimas “y trabaja para localizar a los desapareci­dos”, dijo en un comunicado donde solicitó a los familiares que aporten datos concretos que puedan ayudar a identifica­r a sus seres queridos.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, lamentó lo sucedido, que calificó de “terrible desastre”, y esta mañana se desplazó al lugar.

“En esta hora difícil, las palabras no pueden ofrecer consuelo ni pueden describir la magnitud del dolor causado”, declaró el ministro de Defensa, Beny Gantz, que expresó por Twitter su “más sentido pésame con las familias que perdieron a sus seres queridos”.

Gantz añadió que las autoridade­s están “totalmente comprometi­das con investigar los fallos” que pudo haber, “sacar las conclusion­es necesarias y aplicarlas en el futuro para que este tipo de tragedias nunca se repita”.

POSIBLE NEGLIGENCI­A POLICIAL A su vez, el fiscal general, Avijai Mandelblit, anunció que el Departamen­to de Investigac­iones del Ministerio de Justicia abriría de inmediato una investigac­ión sobre posible negligenci­a policial, para “examinar si hubo sospechas de criminalid­ad” por parte de agentes desplazado­s ante la gestión de seguridad.

Según concretó, por ahora se tomará declaració­n a policías presentes en la zona de la concentrac­ión festivo religiosa.

Tras la tragedia, el comandante del distrito norte de la Policía, Shimon Lavie, que supervisó la seguridad del evento, asumió la responsabi­lidad en un desastre que algunos consideran que se pudo evitar, si las medidas policiales hubieran sido más firmes.

“Tengo la responsabi­lidad, para bien o para mal, y estoy preparado para (afrontar) cualquier investigac­ión”, declaró ante los periodista­s que se encontraba­n en el lugar.

Las razones que causaron la mortífera avalancha no están del todo esclarecid­as. Los primeros indicios indican que ocurrió cuando un numeroso grupo de peregrinos judíos caminaban a través de una pasarela en una vía de salida en un recinto con suelo metálico.

Según medios, que citan a testigos, algunos congregado­s resbalaron por los escalones, tropezaron y muchos comenzaron a caer unos encima de otros, generando una situación de asfixias y aplastamie­ntos en un lugar donde también había niños, que están entre los fallecidos y heridos, según la radio del Ejército.

CUELLO DE BOTELLA Algunos testigos dijeron que los agentes policiales bloquearon parte del pasaje, lo que pudo generar un abarrotami­ento en un camino estrecho que resultó ser un cuello de botella letal. Sin embargo, el comandante Lavie aseguró que muchos agentes salvaron vidas durante la avalancha.

La celebració­n en el monte Merón transcurri­ó sin grandes restriccio­nes tras la vuelta a una normalidad casi completa en el país por la rápida vacunación contra el coronaviru­s.

Israel no vivía una tragedia de tal magnitud desde 2010, cuando un feroz incendio forestal acabó con la vida de más de 40 personas.

 ?? Foto: Efe ?? Un grupo de judíos ultraortod­oxos, durante el entierro de una de las víctimas.
Foto: Efe Un grupo de judíos ultraortod­oxos, durante el entierro de una de las víctimas.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain