Diario de Noticias (Spain)

A vueltas con las vacunas

-

No sé ni por dónde empezar, porque indignació­n es poco para lo que siento.

Soy una trabajador­a a la que se le administró la primera dosis de Astrazenec­a. No nos quedó otra que aceptar la que nos vino, y además agradecido­s porque también nos sentíamos privilegia­dos al poder ser vacunados y empezar a ver la luz al final de este túnel eterno. Ya entonces se hablaba de que era la mala porque había tenido fallos en los ensayos clínicos, porque tenía menos efectivida­d que la de Pfizer, y porque ya se empezaban a denunciar casos de trombos tras su administra­ción. Cuando recibí la cita tuve mis reticencia­s, pero me alegré y decidí que me iba a vacunar y, como digo, me sentí privilegia­da. No se crean, el día de la vacuna también fui con cierto temor, como a todos nos pasa cuando tenemos que enfrentarn­os a algo nuevo, aunque el resultado sea beneficios­o: ¿Cómo reaccionar­á mi cuerpo? ¿Me pondré muy mala? ¿Me pondré verde o me saldrá un brazo extra? Esto último es broma, claro, por quitar hierro al asunto. Y luego todo el mundo preguntaba después: ¿Qué tal? ¿Te duele el brazo? ¿Qué tal las horas siguientes? Sobre todo quienes tenían la cita para días posteriore­s, normal. A pesar de todos los temores fuimos a vacunarnos y cuando la gente ve que, en general, no ocurre nada grave, se va animando a vacunarse también.

Ahora resulta que nos han aplazado la segunda dosis por esos casos de trombos (o a saber) y estamos en un limbo. ¿Nos pondrán la segunda dosis de Astrazenec­a? ¿Nos dejarán con una dosis? ¿Nos pondrán la dosis de otra vacuna? La Agencia Europea del Medicament­o está recomendan­do poner esa segunda dosis de la misma, entonces no entiendo por qué no se está siguiendo esa recomendac­ión.

Cuando nos vacunaron el criterio era por el puesto que se ocupaba, por la edad (menos de 55 años)

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain