OINATZ SIEMPRE TIENE UN PLAN
PELOTA EL VETERANO LEITZARRA AVANZA EN EL CUATRO Y MEDIO DE SAN FERMÍN AL VENCER A ZUBIZARRETA EN ZALDIBAR
PAMPLONA – Tres txapelas del Cuatro y Medio de San Fermín (2011, 2012 y 2019) decoran el palmarés de Oinatz Bengoetxea, un campeón de talla histórica. Su nombre quedará tatuado en el pellejo de la pelota a mano profesional para siempre. En un currículo de casi 19 años en el campo profesional, el leitzarra se las ha visto de todos los colores. Pero siempre guarda una bala en la recámara. Siempre hay un plan. Oinatz es un delantero de raza, forjado entre la plaza y el frontón. Oinatz es un manista integral, alegre hasta el tuétano. Oinatz tiene el peligro de la experiencia y el estilete del talento. Iraitz Zubizarreta lo pagó. El ataundarra, que apenas lleva un año en el campo profesional, asoma como un tipo arrebatado y sin miedo al cuerpo a cuerpo en las lizas individuales, pero ante el navarro no sirve la intención. El guipuzcoano comenzó manejando distancias y perdió pie a mitad de tajo en la eliminatoria de octavos de final del acotado navarro disputada ayer en Zaldibar.
Bengoetxea VI exploró la jaula con una segunda mitad casi impoluta, en la que buscó cargas de profundidad para abrir huecos. Acertó. Después de anotarse varios fallos en la primera decena y permitir una ligera brecha a Zubizarreta III, el leitzarra recuperó la confianza y retomó el rumbo en una modalidad en la que se encuentra cómodo. Buscó las líneas y percutió en el ancho. Bordó el guión. Iraitz –que ya había encajado dos saques en los primeros diez tantos– naufragó. Oinatz remontó en dos tacadas imponentes que cambiaron el signo de la eliminatoria. El ataundarra sufrió en el resto y el navarro movió el cuero, evitando que su rival se encontrara cómodo cerca del frontis. ¡Bingo!
Se registraron igualadas en los primeros compases de la contienda (22, 3-3 y 4-4). Zubizarreta III, activo y descarado, propuso un caleidoscopio arrebatado. Culminó una contradejada con efecto, un pelotazo rápido por la pared y un gancho. Se adelantó 46. Después, en un cúmulo de errores por ambas aceras provocados por la velocidad y el ritmo, Iraitz se aproximó al primer descanso largo en ventaja (8-11). El 8-10 fue un tanto duro y peloteado (18) que terminó con una dejada de Oinatz en la punta que besó la chapa. A pesar de no anotarse el tanto, Bengoetxea VI supo regular.
Un dos paredes inició la reacción del navarro. La espita se abrió con un cambio: jugar en largo. Ante un delantero expeditivo y técnico como Zubizarreta III, plantear un duelo a la corta podía ser un suicidio; así que resolvió el puzle: se puso 14-11 con seis tantos seguidos. Iraitz pudo empatar en el 14, pero no fue capaz de concretar la reacción. El ataundarra buscó velocidad; Oinatz, en cambio, profundidad. En un instante duro, Bengoetxea VI sobrevivió y se lanzó con un dos paredes terapéutico.
En su mejor tramo, el leitzarra llegó al 19-14 con dos saques seguidos. Una carambola de Zubizarreta maquilló el resultado. Una falta del guipuzcoano, una parada al txoko de Oinatz y un saque zanjaron el partido. En cuartos, Bengoetxea VI jugará contra Asier Agirre. ●