El emérito hace escala en un club de moda de Londres antes de llegar hoy a Sanxenxo
Desata las críticas de buena parte del arco parlamentario y obvia el presunto malestar que su visita genera en Zarzuela
PAMPLONA
– Al rey emérito le gusta dar que hablar. No se entiende de otro modo su actualizada agenda, que culmina hoy con un nuevo regreso a Sanxenxo –que no hace sino incomodar presuntamente a Zarzuela, que se enteró de sus intenciones por la prensa– solo horas después de haberse dejado ver en Londres. En la capital inglesa, donde tenía previsto ayer asistir al partido de la Champions entre Chelsea y Madrid, fue cazado en la noche del lunes saliendo de un exclusivo club privado con motivo de “una visita privada”, según recogía el tabloide británico Daily Mail. El citado diario apunta que Juan Carlos de Borbón cenó con un grupo de amigos en el selecto Oswald’s, en el centro de la capital, que abandonó sobre las 22.00 horas escoltado por dos guardaespaldas, quienes lo acompañaron a subir a un vehículo todoterreno negro desde el que saludó con la mano a las cámaras.
El padre de Felipe VI tenía intención de verse con Carlos III después de que no haya sido invitado a su coronación el 6 de mayo, a la que solo irán los reyes Felipe y Letizia. Sin embargo, la Casa Real británica descartó que esa cita fuera a tener lugar.
“Supone una frivolidad más, lo mismo la Casa Real quiere que estas visitas se vuelvan habituales”
SEGUNDA VISITA A SANXENXO
A mediodía de hoy el emérito, de 85 años, pisará por segunda vez tierras gallegas desde que huyera a Abu Dabi y permanecerá en Sanxenxo hasta el domingo con sus amigos del mundo de la vela con motivo de la regata que se celebra este fin de semana, en la que va a participar el Bribón, la embarcación del exmonarca.
Este desplazamiento ha causado malestar en Zarzuela, desde donde se traslada internamente que consideran particularmente “inoportuno” que la visita se produzca en
AITOR ESTEBAN
Portavoz del PNV en el Congreso
“Es una indecencia, debería estar dando explicaciones y no paseándose en regatas”
JAVIER SÁNCHEZ SERNA
Coportavoz de Unidas Podemos periodo preelectoral, aunque reconocen que se trata una decisión personal y la enmarcan en su vida privada, como también ha hecho el Gobierno español, con el PSOE puesto de perfil.
Es plausible el temor a que todos sus movimientos se desarrollen lejos de la privacidad con la que el propio Felipe VI quería que transcurrieran este tipo de apariciones. De hecho, en el encuentro que ambos mantuvieron en Zarzuela el 23 de mayo, la Casa del Rey le recordó a Juan Carlos I que en su carta para notificar que Abu Dabi sería su residencia permanente también había dicho que cuando visitara
España lo haría con “la mayor privacidad posible”. Transcurrido el tiempo y después de meses de inusual silencio, sin recurrir a su entorno más cercano para trasladar mensajes sobre sus pasos o sobre su vida en el exilio emiratí, el emérito vuelve a trastocar el escenario justo cuando los monarcas españoles tratan de acercarse a la calle y ganarse su favor con espontáneas visitas a lugares y pueblos más o menos turísticos.
EL PSOE EVITA PRONUNCIARSE
Entre tanto, en el Gobierno de Pedro Sánchez han adoptado una posición menos asertiva en esta ocasión, enmarcando la visita en el ámbito privado. El portavoz del PSOE, Patxi López, no quiso pronunciarse. No obstante, la portavoz, Isabel Rodríguez, sí que aclaró que el Ejecutivo cree que el emérito debería brindar algún tipo de explicación por sus actividades en el pasado. Otros grupos parlamentarios sí que han expresado en público su mayúsculo enfado. El coportavoz de Podemos Javier Sánchez Serna, aseveró que la visita es una “indecencia” y un “descrédito”. “Debería estar dando explicaciones y no paseándose en regatas”, espetó. Para el portavoz parlamentario de ERC, Gabriel Rufián, “demuestra la impunidad” de España porque “todo el mundo sabe que Juan Carlos I fomentó corruptela en los últimos 40 años y pensaba que parte de este país era suyo”. A juicio del portavoz del PNV, Aitor Esteban, que venga a participar en una regata es “un añadido más a todas las frivolidades” de las que el emérito “ha dado muestra”, al tiempo que deslizó su impresión de que la Casa Real quiere que estas visitas “se vuelvan algo habitual”. Por su parte, la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, censuró los “shows mediáticos” que provocan estas apariciones y reclamó al Gobierno la revocación del título al exmonarca por “higiene democrática”.●