Estella y Merindad Lerín Solidario construirá un hospital en Guinea Conakry
La ONG llevará 2.000 kilos de ayuda humanitaria en un viaje de 5.300 kilómetros
– La relación de ESTELLA-LIZARRA Lerín con Guinea Conakry tiene los nombres y apellidos de Carlos Yerro y Paco del Río que han comenzado nueva aventura en la que darán un paso más en la ayuda a Kawewol, una aldea perdida en el centro de África, a más de 5.300 kilómetros.
Esta semana han partido de nuevo en un viaje de alrededor de dos semana que realizarán en su furgoneta con el logotipo de Lerín Solidario por las Aguas Potables. Una organización que ofrece una valiosa ayuda a esta localidad que, además de hacer posible el agua potable, ya ha emprendido nuevos retos como la escuela que ya es una realidad y donde ya se quiere afrontar el proyecto de un pequeño hospital que será el proyecto inmediato “de momento llevamos material de sillas y mesas para la escuela y ya marcaremos la ubicación del futuro hospital, que será un dispensario donde afrontar las necesidades sanitarias más frecuentes y urgentes” . Un viaje que se ha retrasado “porque esta zona es musulmana y no se puede trabajar durante el Ramadán”.
En la camioneta cerca de 2.000 kilos de peso de ayuda de humanitaria que tendrá que sortear fronteras tan complicadas como las de Marruecos y Mauritania. “Tenemos que ir rápido en el viaje para no dar tiempo a nadie”, aseguraba Carlos Yerro el día anterior de su partida, temiéndose numerosos imprevistos relacionados con posibles intentos de robo, “porque la corrupción en las fronteras ya la conocemos”.
Tras su estancia en Guinea, los dos expedicionarios volverán hacia Navarra, esta vez lo harán “en avión”, tras haber llevado 24 mesas y sillas para la escuela, 6 camillas, baterías y paneles fotovoltaicos, “100 pares de sandalias de Zapatari y 200 camisetas donadas por la juventud de Arróniz”. A su vuelta traerán la ubicación del futuro hospital que llevará el nombre de Lerín y para el cual necesitan 30.000 euros. “La verdad es que estamos contentos con la respuesta de la gente y creo que se podrán conseguir”.
Mientras el viaje continua con sorpresas como la rotura de su furgoneta, Paco y Carlosse acuerdan de sus familiares: “ellos son los que peor lo pasan, pero saben que hacemos lo que tenemos que hacer”, finalizó Yerro.●