Borrell se opone a un diálogo de paz en Ucrania: “Ahora no es el momento”
El alto representante de la UE cree que la única vía es el apoyo militar a Kiev
FLORENCIA
– El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, señaló ayer que “no es el momento” para mantener “conversaciones diplomáticas de paz” y reafirmó que la única propuesta válida es la del presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski. “Desgraciadamente, este no es el momento para conversaciones diplomáticas sobre la paz, es el momento de apoyar militarmente en la guerra”, lamentó Borrell durante su intervención en el foro Estado de la Unión en la ciudad italiana de Florencia.
El diplomático valoró el acercamiento de China tras la llamada entre su líder, Xi Jinping, y Zelenski, pero señaló que el plan de paz anunciado por el país asiático es, en verdad, una “lista de sabias consideraciones”, y subrayó que la única propuesta firme es la de Ucrania. “No será aceptado por Rusia. La realidad es que el presidente ruso, Vladimir Putin ha dicho que aún tiene objetivos militares y mientras no los consiga seguirá luchando”, indicó.
Borrell no mencionó otras propuestas de mediación, como la reciente anunciada por el Vaticano, que Moscú y Kiev niegan, o la del brasileño Lula da Silva, y defendió la postura europea y transatlántica de continuar enviando armas a Ucrania.
“Los planes de paz son excelentes, pero una parte no quiere dialogar”, advirtió desde el Palazzo Vecchio de
Florencia, ante una audiencia en la que también se encontraba el comisario europeo de economía, Paolo Gentiloni, y otros líderes europeos.
“CON TRUMP SERÍA DIFERENTE” Sobre el conflicto, el diplomático indicó que ha unido a Europa y ha llevado a que las relaciones transatlánticas pasen por su mejor momento: “No han sido nunca tan fuertes como hoy” con el presidente de EE. UU., Joseph Biden. “Quizá con Trump las cosas habrían sido diferentes”, comentó.
Según Borrell, uno de los principales errores de Putin fue pensar que los estados europeos “no estarían unidos” por la dependencia energética y habría desacuerdos entre la Unión Europea y Estados Unidos sobre cómo reaccionar.
“Si no apoyáramos a Ucrania caería en cuestión de días. No tenemos elección”, aseveró y recordó que además del apoyo defensivo, Europa reaccionó al imponer sanciones cuyo efecto no es instantáneo: “Son como una dieta, no vas a perder 30 kilos en una semana”.
A pesar de valorar el entendimiento con EE.UU., Borrell reivindicó una mayor autonomía para Europa en el ámbito internacional para ocupar un lugar propio ante la consolidación de nuevas potencias como China. “Los europeos tenemos que aprender a usar el lenguaje del poder –explicó–. (...) En el triángulo estamos más cercanos a Washington pero debemos encontrar nuestra manera de tratar con China”. Una de las prioridades de su oficina será, para este año, preparar un informe que concrete su visión de China, del que dudó que pueda ser un rival para la integridad de las naciones y la seguridad de los europeos.