ESPARZA APELA AL VOTO ÚTIL PARA VOLVER AL MODELO DE LOS ÚLTIMOS GOBIERNOS DE UPN
● El candidato hace del victimismo, la denuncia de los pactos de PSN y Bildu y la añoranza del pasado sus reclamos electorales ● Critica al PP que “disperse voto” y les acusa de favorecer a Sánchez
PAMPLONA
– UPN tiene una estrategia. Consiste en tratar de minimizar la sangría de votos que le ha provocado romper Navarra Suma; captar todo el voto que pueda de entre los votantes socialistas desencantados con Chivite; y trabajar mucho entre bambalinas madrileñas para propiciar un golpe de mano que le haga presidente en caso de que la izquierda abertzale saque un gran resultado y el PSOE salga mal de la foto electoral.
Y por eso el mitin central del candidato de UPN, Javier Esparza, fue un último grito desesperado para intentar llegar al 29 de mayo con más fuerza que la que auguran todas las encuestas, que vaticinan el peor resultado de la historia de UPN.
No es una papeleta sencilla y fue imposible que ese trágico punto de partida no empañara lo que ayer por la tarde quiso ser una “fiesta”. Pero más allá del confeti final y las canciones de un DJ para el cierre del evento, el mitin de ayer fue un encuentro con prisas, un llamamiento urgente e impúdico al voto útil del centro derecha –con ataques directos al PP– para encabezar la alternativa al actual Gobierno. Los pactos entre socialistas y soberanistas acapararon prácticamente todo el discurso del candidato, que a una semana de la cita con las urnas empezó la verdadera campaña de presión sobre Chivite que seguirá por muchas semanas. Y los momentos en los que Esparza pidió el voto para acabar con las teleconsultas médicas, mejorar el empleo o facilitar el acceso a la vivienda –que quizá sean un punto más efectivo que el recurso a Bildu– fueron los menos. Y no será por que no hay ciudadanos descontentos con la situación actual.
Esparza prefirió apostar más a la confrontación, y prueba de ello es que guardó para ayer sus críticas más virulentas en lo que va de campaña también para el PP y quienes “dispersan el voto”. “Solo hacen un favor a Sánchez y a Otegi”, dijo de los populares, antes de aclarar que “si se vota a PP, se debilita a UPN”.
“A los votantes de centro derecha les digo: si Chivite quiere que votes al PP y no a UPN, pregúntate por qué. Los abertzales están encantados con que el PP nos quite algo de voto”, reflexionó. Incluso mandó un mensaje directo a Feijóo que quedó un poco raro. “Yo dije públicamente que quería que Feijóo fuera el próximo presidente. Y no le he escuchado a él decir que quiere que el presidente de Navarra sea yo”.
UPN, UNA VÍCTIMA
Ese tono general de queja, de agravio constante y hasta con un punto victimista utilizó para reforzar el nuevo papel de UPN. Ese por el que los regionalistas son el único partido navarro, el que siempre está ahí, en solitario, sin ayuda de nadie cuando no directamente con palos en la rueda de
JAVIER ESPARZA
Candidato de UPN otros. Esparza añoró los viejos gobiernos de UPN, los de “la tasa de paro más baja” y los servicios públicos de calidad pagando menos impuestos. Y construyó un discurso de reproche que fue de 1978 –cuando “los partidos nacionales empezaron a atacar a Navarra con la Transitoria Cuarta– hasta la crisis de 20112014, en la que afeó a la UE que entonces no actuara como ahora, dando ayudas. “Nadie nos ha regalado nada nunca, ni a nosotros ni a esta tierra, nos lo hemos ganado por derecho”.
Todo ese telón de fondo le sirvió para venderse como un gran partido acosado por todos los demás, y que ofrece algo que no puede dar ningún otro: un funcionamiento autónomo, propio, navarrro. “Ya vale de Gobiernos que rinden pleitesía a líderes nacionales. Vamos a hacer políticas para Navarra, no un corta y pega de Madrid”. Un recurso a la baza localista que los hechos y el pasado cercano han dejado sin efecto. Pero que junto con el ataque a todos los demás y la dialéctica de víctima es todo lo que le queda a Esparza para intentar llegar al poder.●
“Si se vota PP, se debilita a UPN. Se dispersa el voto y el único que sale beneficiado es Sánchez”
“Ya vale de gobiernos que rinden pleitesía a Madrid, de políticas de corta y pega desde allí”