La sonrisa de Helen Keller
Tras su paso fugaz por Filmin dentro de la programación de Documenta-Madrid, la National Gallery of Art acaba de hacer disponible de forma gratuita en su web una de las grandes películas de 2020, Her socialist smile, de John Gianvito, un documental que recorre el pensamiento político de Helen Keller (18801968), activista sordociega comprometida desde su juventud con los derechos civiles desde su ideario social-comunista, hija del Sur y sus diferencias, y voz indispensable para entender no sólo el siglo XX sino la deriva de Estados Unidos que nos ha llevado hasta los acontecimientos del Capitolio hace apenas una semana.
Un documental no al uso, como no podía ser de otra manera tratándose de Gianvito, igualmente comprometido desde la izquierda con la historia y los valores fundacionales de la nación americana, que elude los caminos de la narración convencional o el recurso de archivo, por otro lado prácticamente desaparecido después de un incendio en la fundación Keller tras los atentados del 11-S, para trabajar sobre la propia palabra de Keller, fragmentos de su autobiografía, sus discursos, conferencias o entrevistas, como eje vertebrador de unas imágenes, ya sean de la naturaleza en su dimensión más entomológica o de espacios vacíos en su día ocupados por la activista y sus seguidores, que eluden precisamente su carácter de mera representación redundante para que sean precisamente la palabra y las ideas, leídas o escritas, las que golpeen en primera línea al espectador.
Maneras straubianas para un filme político y poético sobre una mujer única cuya figura escapa de cualquier tópico de superación de la discapacidad para materializarse como cuerpo pensante, como conciencia de un idealismo humanista y de justicia social que acompañó y alentó la lucha por los derechos de los trabajadores, los negros o las mujeres, la condena del capitalismo feroz, que saludó la revolución soviética aunque supo rectificar ante sus desviaciones (explicadas aquí por Noah Chomsky), que escapó de las garras de la Caza de Brujas antes de retirarse a su particular paraíso perdido de la infancia e imaginar la felicidad como un largo paseo por el bosque.
Her socialist smile nos devuelve la vigencia de su legado con rotundidad y belleza, con transparencia y emoción, con distancia y sentido del presente, ese que, en el último instante, golpea abruptamente con un remolino furioso de imágenes de líderes políticos del presente, de Trump a Putin, que no han dudado en pisotear los progresos del siglo XX y alentar el regreso del fascismo populista. Ante todo ello, la sonrisa de Helen Keller, su voz escondida pero clara, su palabra firme y reveladora, siguen resonando como una metralleta de ideas para las conciencias de bien.