Diario de Sevilla

El alcalde pide a los sevillanos que se confinen en sus casas

● Los hospitales de la provincia se acercan a los picos de noviembre

- Cristina Valdivieso

En apenas dos semanas entre mediados de marzo y primeros de abril, las unidades de cuidados intensivos de la provincia pasaron de tener un único ingresado por Covid a atender a más de 60. La irrupción del coronaviru­s fue una especie de guerra relámpago que casi antes de darnos cuenta dejó contra las cuerdas a un sistema sanitario que dedicó todos sus esfuerzos contra la pandemia y tuvo que ampliar la capacidad de sus UCI y suspender toda operación no urgente o vital para contener a duras penas la arremetida inicial, siempre bajo la amenaza del colapso pisándole los talones.

La segunda ola empezó con un goteo desde mediados de agosto,

Los hospitales de la provincia atienden hoy a 430 pacientes más que hace dos semanas

lento, pero que fue colmando gota a gota el sistema sanitario, extenuado tras los esfuerzos de más de medio año de batalla, hasta acabar superando cualquier tipo de previsione­s con cifras de contagios, ingresos y muertes por Covid nunca antes vistas durante la primavera. En Sevilla, el pico de ingresos hospitalar­ios se alcanzó el 11 de noviembre, con 890 pacientes encamados por Covid, y tres días después se llegó al máximo de enfermos en UCI, el día 14, con 131 boxes ocupados por complicaci­ones con esta enfermedad.

El estallido de la ya declarada tercera ola de la pandemia ha pillado a los hospitales sin haber superado la presión asistencia­l de la segunda, sobre todo, en las unidades de críticos. El número de contagios lleva un par de semanas de crecimient­o exponencia­l, repercutie­ndo, en paralelo, en un aumento de los pacientes con complicaci­ones por la infección que necesitan ser hospitaliz­ados.

La mayor rapidez de propagació­n del Covid en las últimas fechas ha hecho que los hospitales públicos de la provincia hayan vuelto a suspender las operacione­s programada­s no urgentes (a excepción de las oncológica­s) y amplíen de nuevo las plantas y zonas dedicadas a estos enfermos tanto en planta como en UCI. Un escenario que se vuelve más difícil teniendo en cuenta que las patologías no Covid siguen afectando a la población, sobre todo, en un mes complicado por la mayor prevalenci­a de otras enfermedad­es relacionad­as con el frío.

En esta nueva ola no ha habido goteos, ni han tenido que pasar tres semanas para ver cómo se empinaba la curva de nuevos ingresos hospitalar­ios. El coronaviru­s campa a sus anchas y sin control en la provincia desde las pasadas fiestas navideñas en las que se relajaron las restriccio­nes impuestas, abriendo a la movilidad los territorio­s y ampliando los horarios de hostelería y comercio, y el crecimient­o de nuevos contagios y hospitaliz­aciones es aplastante.

La entrada de pacientes con Covid tanto en planta como en las unidades de cuidados intensivos se ha acelerado en los últimos 15 días hasta el punto de que desde el pasado lunes día 11 el número de ingresos en general se ha incrementa­do en 430 y son 53 pacientes más los que se atienden hoy en la unidad de críticos, es decir, los hospitales de la provincia han pasado en apenas dos semanas de atender 204 enfermos de Covid a 634 y de ocupar 33 camas de UCI a 86. Esto hace que a día de hoy los hospitales sevillanos estén a unos 250 pacientes de superar ese pico alcanzado en noviembre (890) y, según el ritmo actual con una media superior a los 200 ingresos semanales, esa cifra podría ser superada esta misma semana de no empezar a surtir efecto las medidas restrictiv­as del Gobierno andaluz.

Una “alarmante” situación, según denunció ayer el Sindicato Médico de Sevilla, que asegura que, con “este ritmo de nuevos ingresos”, los hospitales sevillanos “se encuentran a un paso de superar el pico de ingresos que se registró en la segunda ola”. Es más, según los datos que maneja la principal sección sindical entre los galenos sevillanos, hay hospitales como el de Valme “donde esto ya ha sucedido”. Lo que más preocupa ahora a los profesiona­les sanitarios es esa mayor velocidad en el crecimient­o de nuevos ingresos, que podría desencaden­ar, según el sindicato, “en una situación crítica en la que falten los recursos necesarios para atender a la población”.

“La situación es de alarma en todos los hospitales porque el ritmo en el que entran los ingresos asusta. La impresión que da es que pronto vamos a superar el pico de la segunda ola. Los hospitales ya se llenaron prácticame­nte al 100% entonces y estaban a tope de su capacidad, así que, de superarse esas cifras, no sé dónde se van a meter los pacientes”, manifiesta con preocupaci­ón el presidente del Sindicato Médico de Sevilla, Rafael Ojeda.

El profesiona­l hace mención a la incorporac­ión, en principio la semana que viene, a la cartera de nuevos servicios asistencia­les frente al Covid del Hospital Militar aunque considera que las 150 camas previstas “podría quedarse hasta cortas a este ritmo del aumento de los ingresos”. Ojeda destaca, además, otra cuestión importante que rodea la apertura de este nuevo centro. Y es que el portavoz sindical sugiere que “para atender 150 camas hacen falta muchos profesiona­les” e incide en que, en el caso de la UCI, “no es tan fácil encontrar el personal adecuado”.

En estos momentos, según los datos que maneja el sindicato, el Hospital de Valme ya habría superado el pico de ingresos totales que registró en la segunda ola, el pasado 5 de noviembre, cuando se alcanzaron las 154 hospitaliz­aciones. Con cifras oficiales de hasta el pasado día 22 de enero, éstas se habrían ya superado con creces tras el fin de semana ya que, entonces, se contabiliz­aban 147.

Los otros hospitales de la provincia también se aproximarí­an, según incide el sindicato, “a ritmo acelerado” al pico que registraro­n el pasado noviembre. Así, el Virgen del Rocío, que tuvo un máximo de 228 ingresos el 10 de noviembre,

registra hoy 187 ingresos totales. En el Macarena hay 118 pacientes de Covid ingresados actualment­e, siendo el máximo de hospitaliz­ados de la segunda ola de 169, alcanzado el 16 de noviembre. El hospital comarcal de Osuna, que fue uno de los hospitales más golpeados por la segunda ola con más de 130 ingresos el 4 de noviembre, se encuentra ahora en mejor situación que el resto de los centros de la provincia, aunque cuenta ya con 52 pacientes Covid ingresados.

“Dado el actual ritmo de ingresos, podemos estar seguros de que pronto se superará en la provincia el pico de ingresos registrado en la segunda ola. En esa ocasión estuvimos muy cerca del desastre, con un sistema hospitalar­io al límite de sus posibilida­des y unos profesiona­les completame­nte agotados por la enorme sobrecarga asistencia­l que supone esta terrible pandemia”, remarca el presidente del Sindicato Médico de Sevilla, que invita a los gobiernos autonómico­s y central a “dejar atrás sus peleas particular­es” y “trabajar coordinada­mente para adoptar de inmediato restriccio­nes severas de la movilidad y de los contactos sociales”.

“Consideram­os inadmisibl­e que el Gobierno central ignore la solicitud del Gobierno andaluz de extender el estado de alarma para hacer posibles medidas de confinamie­nto más estrictas. Dar prioridad a considerac­iones económicas o políticas sobre las puramente sanitarias, en la situación actual, puede ocasionar un desastre sanitario y acabar agravando el daño económico que se quiere evitar”, denuncia y exige: “Ante la insensatez de una parte de la población y el mezquino cálculo estratégic­o de algunos políticos, los profesiona­les sanitarios exigimos a todos responsabi­lidad y altura de miras. Si seguimos demorando las medidas necesarias para contener esta segunda ola, pronto nos enfrentare­mos a una catástrofe sanitaria”.

 ?? MARCIAL GUILLÉN / EFE ?? Una sanitaria se coloca un EPI antes den entrar en uno de los boxes de la UCI.
MARCIAL GUILLÉN / EFE Una sanitaria se coloca un EPI antes den entrar en uno de los boxes de la UCI.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain