Comienzan los trabajos para salvar el magnolio de la Catedral
Se ampliará el alcorque del singular árbol, en declive desde la reforma de la Avenida
El Ayuntamiento de Sevilla, a través del servicio de Parques y Jardines, ha comenzado ya las tareas para ampliar el alcorque del magnolio de la Catedral, uno de los árboles recogidos en el catálogo de ejemplares singulares de Sevilla, y salvarlo así del alarmante declive que padece desde la peatonalización de la Avenida, acometida en el año 2007.
Darle más amplitud al alcorque era una de las principales recomendaciones realizadas en el informe técnico en que se estudiaban las causas del deterioro y las acciones que habría que desarrollar para mejorar el estado de conservación de este árbol plantado hace unos 80 años, aproximadamente. El Ayuntamiento obtuvo hace poco más de un año el visto bueno de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico para poder ampliar el alcorque para darle unas dimensiones más acordes a las dimensiones del árbol.
Las obras, que salieron a licitación por 18.448,54 euros, supondrán doblar las dimensiones del alcorque y pasar de los 3,60 por 4,35 metros actuales a los 6 o 7 por 9,30 metros. Esta intervención también servirá para limitar el acceso por las cara Norte y Este del polígono resultante, un espacio necesitado por el árbol para recuperarse con garantías. También se plantará un seto que delimite el polígono del parterre, se renovará la tierra para aportarle nutrientes y se protegerá el ejemplar de los tendidos eléctricos reconduciendo las canalizaciones. El declive del magnolio, situado en la esquina Suroeste de la Catedral comenzó tras la reforma de la Avenida, cuando se eliminaron el parterre y se redujo el alcorque, generando una “situación de estrés” en el árbol. Los técnicos advertían hace unos meses de que el entorno era “demasiado austero” como para poder aumentar las expectativas de futuro y supervivencia. El magnolio dispone de un suelo “empobrecido, alcalinizado, compactado y falto de nutrientes que provoca que no pueda regenerar el sistema radicular que se vio afectado por las sucesivas obras y limitaciones de espacio”, según los informes.
“Este recrecimiento del alcorque permitirá a las raíces ganar más espacio, así como obtener nutrientes a través de una nueva aportación de tierra. Tratamos de otorgar más vigor a este histórico magnolio tan característico del entorno patrimonial en el que se enclava, y haciéndolo desde el rigor técnico de los profesionales del Servicio de Parques y Jardines. En suma, se busca frenar su deterioro a la vez que favorecer el normal crecimiento del árbol”, señaló el delegado de Transición Ecológica y Deportes, David Guevara, que realizó ayer una visita de supervisión del inicio de obras.
No hay constancia de cuándo fue plantado el magnolio en esta esquina de la Catedral. Según José Elías Bonels, que ha sido adjunto a la jefatura de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Sevilla desde 1956 hasta su jubilación, por las fotos que ha podido consultar y la altura del árbol pudo ser a principios de la década de los años 40 del siglo pasado. En esta esquina estuvo situado entre los años 1967 y 1985 el monumento al imaginero Juan Martínez Montañés que hoy se encuentra en la Plaza del Salvador.
Árbol ornamental procedente del sudeste de los Estados Unidos, fue introducido en Europa en 1737. De crecimiento lento, puede llegar a superar los 20 metros de altura. De hojas perennes, sus f lores amarillas que tornan en blanco exhalan un agradable perfume.
En Sevilla hay diversos ejemplares de magnolios en los jardines el Alcázar, el Parque Amate, el Parque Celestino Mutis o los Jardines del Cristina.