Bankia gana un 57,6% menos, pero saca músculo ante la fusión con Caixabank
La Bolsa premia los resultados y el exceso de capital de 2.934 millones con un avance del valor de su acción del 4,43%
Bankia cerró 2020, su último ejercicio en solitario, con un beneficio de 230 millones de euros, un 57,6% menos que en 2019, mejor de lo que esperaba el mercado, y saca pecho de que mantiene su “músculo comercial”, lo que le da fuerzas ante la fusión con Caixabank.
De esta forma se expresó el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, en la última rueda de prensa de la entidad, en la que destacó el “espectacular” cuarto trimestre del banco, que en 2020 dotó a provisiones 1.000 millones, entre las habituales y las extraordinarias para hacer frente a la crisis del coronavirus.
En un encuentro que se podía seguir tanto presencial como virtualmente, el banquero mostró su agradecimiento al equipo de Bankia por el trabajo de estos años, del que se siente “muy orgulloso”, y se mostró “muy ilusionado” por la nueva etapa y por su futura labor como presidente del nuevo Caixabank. Goirigolzarri admite que 2021 estará marcado por la incertidumbre sobre la evolución de la pandemia y de la tercera ola de contagios, pero en línea con la idea de la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, defendió acelerar la vacunación. “Es lo más urgente y prioritario ahora mismo”, sentenció.
Respecto al impacto de la fusión en oficinas y plantillas, insistió en que, cuando haya datos, los primeros en enterarse serán los sindicatos, al tiempo que explicó que la marca Bankia desaparecerá en cuestión de meses, de forma “pausada pero rápida”.
El exceso de capital de Bankia alcanzó los 2.934 millones a cierre de 2020, por encima del objetivo de 2.500 millones del banco. Sin embargo, debido a las limitaciones de los supervisores, la entidad descartó la idea de abonar un dividendo extraordinario y ahora espera que, tras la fusión con Caixabank, el nuevo banco pueda retribuir al menos el 15% de sus resultados antes de septiembre.
A la espera de este dividendo y con unas cuentas mejor de lo esperado, la acción de Bankia avanzó un 4,43% ayer y estuvo entre los valores más alcistas del Íbex, seguido de cerca por Caixabank.
Con respecto a la política de comisiones, Goirigolzarri destacó que tres millones de clientes de Bankia se han librado de ellas por su relación con la entidad y confía en no perder clientes y que esa cifra sea mucho mayor cuando culmine la fusión, ya que Caixabank, opinó, tiene la misma filosofía.
En cuanto a las cuentas de 2020, la ratio de capital de máxima calidad CET1 fully loaded –con todos los requerimientos normativos– se situó a finales de diciembre en el 15,48%, frente al 13,02% de 2019.
El crédito neto concedido a clientes sumó 121.000 millones, tras crecer un 3% interanual, en tanto que los depósitos minoristas aumentaron casi lo mismo, hasta 128.460 millones.
La tasa de morosidad se situó en el 4,7% al cierre de 2020, menor que el 5% de 2019, y la tasa de cobertura mejoró hasta el 58,2%, desde el 54% precedente.
Bankia concedió 42.600 millones a empresas, un 17% más, y el saldo de hipotecas creció en 3.348 millones, un 14,3%; el crédito al consumo, sin embargo, bajó un 53,6% y quedó en 1.229 millones.
Bankia concedió a autónomos, pymes y empresas cerca de 11.000 millones con aval del ICO y aprobó 49.000 moratorias hipotecarias y más de 61.500 moratorias en préstamos al consumo.
El margen de intereses –que recoge la mayor parte de los ingresos– se redujo un 5,9% y quedó en 1.904 millones, en tanto que el ordinario –que añade comisiones– bajó casi un 5% y el neto antes de provisiones, un 8,4%.
La cartera de clientes digitales representó el 60,5% del total, frente al 53,3% de 2019, lo que se traduce en más de cuatro millones de clientes por este canal, que concentra ya casi el 47% de las ventas.
Goirigolzarri admite estar “muy ilusionado” con su papel como presidente del banco fusionado
LA jornada comenzó con las referencias negativas del cierre de la sesión bursátil de anteyer en Wall Street, donde se registraron las mayores caídas desde finales del mes de octubre. Una evolución que estuvo marcada, entre otros factores, por la reunión de la Fed, que descartó por el momento cambios en la orientación de su política monetaria.
Los mercados de la región Asia-Pacífico han recogido esta tendencia y se han visto lastrados por las restricciones adoptadas en China, que reducirán significativamente los viajes durante el periodo vacacional del Nuevo Año Lunar que dio comienzó ayer.