España supera a Francia y logra el bronce en el Mundial (35-29)
● Los de Jordi Ribera demostraron más hambre que el equipo francés liderados por un gran Álex Dujshebaev
35 España 29 Francia
España: Corrales; Solé (4), Álex Dujshebaev (8), Raúl Entrerríos (4), Dani Dujshebaev (6), Ariño (2) y Marchán –equipo inicial- Pérez de Vargas (ps), Aleix Gómez (4, 1p), Maqueda, Sarmiento (1), Cañellas (1), Ángel Fernández (1), Figueras (4), Gedeón Guardiola y Morros.
Francia: Gerard; Abalo (1), Remili (2), Fabregas (4), Dipanda, Acquevillo (2) y Guigou (2) –equipo inicial– Genty (ps), Lagarde, Richardson, Mem (3), Tournat (4), Mahe (2, 1p), Descat (7, 1p), Claire y Porte (2).
Tanteo: 4-0, 8-4, 10-6, 13-8, 14-10 y 16-13 (descanso) 18-16, 22-18, 26-23, 3125, 33-27 y 35-29 (final).
Árbitros: Gubica y Milosevic (croatas). Excluyeron por dos minutos a Aleix Gómez por España y a Dipanda por Francia.
Incidencias: Encuentro por la medalla de bronce del Mundial de Egipto 2021 disputado en el Cairo Stadium Hall sin público.
La selección española volvió a subirse a un podio mundialista, ocho años después, tras colgarse la medalla de bronce en el Mundial de Egipto, al imponerse por 35-29 a Francia mostrando desde el comienzo una mayor hambre por ganar que su rival. Se suele decir que el equipo que mejor se recupera del varapalo que supone quedarse fuera de la gran final es quien acostumbra a ganar la medalla de bronce. Y viendo la sobresaliente puesta en escena, quedó claro que los Hispanos lo superaron mejor y más rápidamente que el conjunto francés.
No sólo por la intensidad defensiva que mostró desde el principio el conjunto español, ni por la cuatro paradas que ya sumaba Rodrigo Corrales en los primeros diez minutos de juego, sino por el hambre con el que afrontaron la contienda los internacionales españoles. Una situación que permitió a los de Jordi Ribera adquirir rápidamente una cómoda ventaja de cuatro tantos (4-0). Sin embargo, España no sólo brilló en defensa, sino también que en ataque, encontrando siempre en el brazo de Álex Dujshebaev la fórmula para martillear la portería gala.
Pero si alguien pensaba que Francia, el equipo con más títulos mundiales (seis), iba a rendirse tan fácilmente, se equivocaba. Espoleados por el guardameta Vincent Gerard, el cuadro galo se agarró a la pista. Con los pivotes Ludovic Fabregas y Nicolas Tournat como punta de lanza, Francia comenzó a acercarse peligrosamente en el marcador, hasta situarse a tan sólo dos goles (14-12). Una reacción que se encargaron de frenar Corrales y Álex Dujshebaev, que con un último trallazo permitió a España arrancar la segunda mitad con tres tantos de ventaja (16-13).
Con una mayor intensidad, los Hispanos saltaron en la segunda parte y con una sólida defensa los de Jordi Ribera alcanzaron la máxima diferencia del partido (2418) a falta de 20 minutos para la conclusión. Ni aún así dimitió Francia, que apostó el todo por el todo. De la mano de Mem y, sobre todo, del extremo Hugo Descat, el conjunto francés logró volver a soñar con meterse de nuevo en la contienda, tras dejar su diferencia en la mitad (26-23).
Pero si Francia tenia a Mem, España siempre pudo contar con un Dani Dujshebaev que con sus goles y pases a los pivotes permitió a los Hispanos recuperar la máxima diferencia (31-25). Como último recurso el equipo galo trató de convertir el choque en un frenético ir y venir de un área a otra. Una trampa en la que cayó España (33-29). Un tiempo muerto de Jordi Ribera le sentó bien al equipo y con un gol de Aleix Gómez, tras una nueva asistencia de Álex Dujshebaev, y una nueva parada de Corrales España sentenció un choque (3529) que permitió a los Hispanos volver a subir, ocho años más tarde, a un podio Mundial.
Ocho años después, desde el oro en 2013, los ‘Hispanos’ volvieron a un podio mundialista