La pandemia reduce casi a la mitad los viajeros del Consorcio
● El uso del transporte público cayó en 2020 en un 47,7% con respecto a al año anterior ● Venía creciendo, con un alza de más del 6,4% en febrero
El Consorcio de Transporte Metropolitano del Área de Sevilla, que cubre las conexiones en autobús entre 45 municipios, incluida la capital, cerró 2020 con 14.932.570 viajeros y un descenso del 47,7% con respecto a 2019, algo menor a la media andaluza, según la Junta, que destaca la cifra de viajeros a pesar de la pandemia y las limitaciones de movilidad vinculadas al estado de alarma.
La crisis del Covid-19 frenó la tendencia al alza que se había registrado en las líneas del Consorcio y que habían cerrado 2019 en crecimiento, con más de 28 millones de desplazamientos. El año 2020 también empezó con subidas. En concreto, fue leve en enero, con el 0,7%, pero importante en febrero, con un repunte del 6,4%.
Esos “buenos números” se truncaron a partir del 14 de marzo con la declaración del estado de alarma. Ese mes, la caída ya fue de más del 52% y rozó el 94% en abril, de confinamiento duro al completo. En mayo, la caída con respecto al mismo mes del año anterior fue del 85%.
Los descensos se moderaron algo durante los meses de verano (un 55,6% en junio; un 40,5% en julio; un 37% en agosto y un 43,1% en septiembre), hasta comenzar a subir de nuevo con la segunda ola y las nuevas restricciones. En concreto, la caída de viajeros en octubre de 2020 con respecto a 2019 fue del 46,8%; del 56,4% en noviembre y, en diciembre se superó el 47%. Para mantener los servicios y evitar que la caída de ingresos y el déficit repercutiera en los operadores, estas empresas de transporte han tenido compensaciones con los fondos habilitados por el Gobierno central, cuya tramitación agilizó la Junta.
La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio incide en que a pesar de las restricciones, las empresas concesionarias han ofrecido en todo momento una oferta por encima de la demanda, adaptándose a las limitaciones de movilidad en vigor en cada momento.
Como ejemplo está la decisión adoptada por los consorcios metropolitanos de reforzar servicios en hora punta con motivo de las restricciones determinadas por el nivel 4 de alerta, que limitan el aforo de los vehículos al 50% respecto al máximo permitido y que se están haciendo en 11 líneas, especialmente demandadas, que cubren 26 localidades.
Además de la oferta de servicio, se han mantenido desde antes de la declaración del estado de alarma del pasado marzo protocolos de prevención frente al virus, entre los que está la desinfección diaria de autobuses, el uso de la mascarilla o la recomendación del pago con tarjeta. Ello ha propiciado un nuevo incremento de los usuarios poseedores de la tarjeta. Al cierre de 2020 se alcanzaron las 922.849 tarjetas operativas: 50.108 más que hace un año.
Los autobuses interurbanos experimentaron un descenso del 47,9%, con 5.555.433 viajes, motivado no sólo por el confinamiento, sino por los diferentes cierres perimetrales. Por su parte, el uso de la tarjeta del Consorcio en los autobuses urbanos (dentro de un mismo término municipal) tuvo una bajada del 42,7%, con 4.126.001 viajes; mientras que su uso en el Metro de bajó un 50,7%, con 5.251.136 desplazamientos.
El uso de la tarjeta de viaje se impone más todavía al pago en metálico