Una gasolinera siembra la discordia en Ciudad Jardín
● Los vecinos se posicionan contra la estación de servicio que se está construyendo en los campos de fútbol del Marqués de Contadero
Los camiones entran y salen de la obra. La construcción de una gasolinera en los antiguos campos de fútbol del Marqués de Contadero, entre la Ronda del Tamarguillo y la calle Francisco Buendía, es una realidad. Un hecho que ha llenado de pancartas los balcones. Gasolinera = Peligro se puede leer en una de ellas. Los vecinos del barrio de Ciudad Jardín se oponen rotundamente a su construcción. Antonio Martín, que vive en la zona desde hace medio siglo, es quizá el más activo en esta lucha vecinal. “En agosto de 2018, cuando construyeron la hamburguesería, me di cuenta de que los rumores que había escuchado en el bar eran ciertos: van a construir una gasolinera en el barrio”.
Martín ya venía colaborando estrechamente con el Distrito Nervión, a quien avisaba de cualquier incidencia que ocurriera en la zona. A ellos y al Ayuntamiento había requerido en varias ocasiones el adecentamiento y limpieza de los antiguos terrenos deportivos, donde sólo la colocación de un circo les dio uso en los últimos años. Tras mucho “papeleo”, consiguió que el Consistorio requiriera a la Real Federación Andaluza de Fútbol (RFAF), propietaria de la parcela, arreglarla. Una reivindicación a la que sumó su negativa a la gasolinera que en estos días se construye. Para ello, se ha apoyado de otros vecinos y de las asociaciones de madres y padres de dos centros educativos: el colegio Vicente Benítez y la guardería Martín de Gainza. Junto a sus representantes acudió el pasado martes a una reunión con la Gerencia de Urbanismo.
Urbanismo, aparte de dar celeridad a los requerimientos para adecentar la parcela de la RFAF, les explicó que la nueva gasolinera es legal. El Real Decreto estatal de 4/2013 del 22 de febrero de medidas de apoyo al emprendimiento y de estímulo al crecimiento y la creación de empleo –aprobado por el Gobierno central– lo ampara. Esta norma señala que las estaciones de suministro de combustible al por menor “son compatibles” con los usos terciarios. Y dice expresamente que “el órgano municipal no podrá denegar la instalación de estaciones de servicio o de unidades de suministro de carburantes a vehículos”. De esta forma, las limitadas competencias municipales han obligado a tramitar las licencias solicitadas. En este caso, el promotor es la RFAF, titular de la parcela de equipamiento deportivo con un aprovechamiento anexo de uso terciario recogido en el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU). Como uso asociado, se incluye el establecimiento de comida rápida,
Fuentes del Ayuntamiento concretan que en 2018 se realizó, con los informes técnicos favorables, un ajuste de esta parcela terciaria, que no tenía incidencia sobre sus dimensiones (1.750 metros cuadrados de los 21.000 totales). Es decir, se mantienen los metros cuadrados de uso deportivo y los metros cuadrados de uso terciario, pero simplemente hubo un cambio en la parcela con una nueva segregación. Cambio de forma, pero no cambiaron ni los derechos ni obligaciones previsto en el PGOU. En esta parcela terciaria, con las dimensiones previstas en el PGOU y con la segregación aprobada según los informes técnicos, la Federación Andaluza de Fútbol desarrolla, en primer lugar, una obra de nueva planta para restaurante de comida rápida. Y posteriormente ejecuta un proyecto de unidad de suministro de carburante asociado, para lo que se vale del decreto estatal de 2013. El promotor que, en nombre de la RFAF pidió la licencia, acogiéndose a una normativa estatal, es Kuwait Petroleum, empresa propietaria de las estaciones de servicio Q8.
No obstante, no son los vecinos los únicos sorprendidos por que una institución deportiva opte por apoyar la construcción de una gasolinera. Manuel Fernández, presidente de la Asociación Deportiva Nervión, cree que “no es bueno porque la mayoría de los vecinos son mayores y esos terrenos deberían ser para el fútbol”. Fernández dirige el club vecino de los terrenos. Es decir, el Centro Deportivo Antonio Puerta. Lamenta que Eduardo Herrera, presidente de la RFAF hasta su dimisión en 2019, no atendiese su petición “para hacer crecer el club y el proyecto deportivo del Nervión”. Él ha sido uno de los muchos testigos del cambio de campos de fútbol a “solar y escombrera”, como indica. Y ref leja el pesimismo de otros vecinos de la zona: “Es difícil que lo paren ya”.
Una idea que no pasa por la cabeza de Martín, que está dispuesto a llevar el asunto ante la justicia si las administraciones no hacen nada por detener la obra. Precisamente, la amenaza de tomar acciones legales fue la que impulsó a uno de los mandatarios del fútbol andaluz a responder a sus llamadas. “Me llamó Pedro Borrás (vicepresi
La parcela tiene 21.000 metros cuadrados, de los que 1.750 son para uso terciario
dente) y me dijo que si quería saber, que denunciara”, explica Martín, que también recurrió a Facua, que le confirmó el proyecto petrolífero, y al Defensor del Pueblo Andaluz. “Desde diciembre de 2019 hasta septiembre de 2020 pidió Jesús Maeztu al Ayuntamiento información sobre la gasolinera”, relata contrariado con el gobierno local y agradecido con el sacerdote gaditano. Los argumentos sanitarios son la baza vecinal contra el proyecto del ente deportivo, que ha comenzado a reutilizar esta parcela con una hamburguesería y una gasolinera. Este periódico intentó, sin éxito, contactar con la RFAF para conocer su versión.