El primer ingreso y la primera alta son dos imágenes que ya me llevo grabadas”
EL médico especialista en Medicina Interna Nacho Vallejo es el coordinador de la hospitalización. En poco más de diez días de trabajo en el centro, el profesional asegura haber vivido ya dos momentos “de los que no se olvidan”. “La llegada de nuestro primer paciente y la salida de la primera alta. Son momentos que te marcan y que, dentro de lo trágico que es el hecho de tener que abrir un hospital por la presión de la pandemia, se viven de forma positiva”, explica el facultativo. Desde su punto de vista, trabajar aquí no es muy diferente a cómo lo hacía en el Virgen del Rocío. “Aunque estemos en edificios distintos, yo me siento personal del Virgen del Rocío. El modelo de trabajo es el mismo y el perfil de paciente también. Es verdad que el estar aquí es un reto profesional muy bonito y, además, doble porque no sólo recibimos y vemos a los pacientes, sino que confirmamos que todo lo que se ha realizado previamente esté adecuado y vaya funcionando. Pero nuestro esfuerzo es del 200% allá donde vayamos”, afirma. Sobre las instalaciones, sí destaca las ventajas que aporta este nuevo centro para atención de los pacientes. “Tenemos mucho espacio y mucha luz y claridad natural y eso ayuda a mucho a su estancia”. En general, su balance es “más que positivo”. “Tenemos que pulir muchas cuestiones porque venimos de trabajar en determinadas dinámicas del otro edificio que aquí han cambiado un poquito y los cambios y adaptaciones siempre cuestan un poco, pero este cambio ha sido un soplo de aire fresco y la gente está con ganas, optimismo y mucha ilusión”, destaca.