Las nuevas casas de apuestas tendrán que estar al menos a 150 metros de los colegios
● La Junta limita en la ubicación de los salones de juego y endurece las multas si accede un menor
Los nuevos establecimientos de juego y apuestas tendrán que estar a una distancia mínima de 150 metros de los colegios, según la modificación de la normativa andaluza que data de 1986, anunció ayer el consejero de Hacienda y Financiación Europea, Juan Bravo. En comisión parlamentaria, el consejero avanzó que en el primer trimestre de este año estará culminado el decreto que modificará el reglamento de salones de juegos y apuestas en Andalucía con un nuevo régimen de distancias mínimas para su establecimiento cerca de equipamientos educativos.
El nuevo decreto regulará distancias mínimas de 150 metros para ubicar nuevos salones de juego respecto a centros educativos, un control de acceso exterior, se endurecen las sanciones de 10.000 euros y cierre si accede un menor y se limita la publicidad, entre otros aspectos para “proteger a los más vulnerables” de la ludopatía, según el consejero.
El principal partido de la oposición, el PSOE, considera que la Junta está con el “lobby de las casas de juego y apuestas, y toma partido por este sector en vez defender la lucha contra la ludopatía”, según la diputada socialista, Noelia Ruiz, para quien la nueva normativa es insuficiente porque los ayuntamientos exigen un mínimo de 500 metros de distancia y no sólo de los colegios sino también de los equipamientos deportivos y culturales, entre otros. Los socialistas acusan al Ejecutivo de “enmascarar un conflicto competencial con los ayuntamientos”, ya que algunos han hecho modificaciones puntuales del PGOU para aumentar las distancias mínimas de los nuevos salones de juego respecto de los colegios y otros equipamientos urbanos.
Sin embargo, la Junta ha recurrido estas modificaciones urbanísticas porque, según el consejero, invaden las competencias autonómicas en materia de apuestas y juego, que datan de una normativa 1986 cuando gobernaba el PSOE y algunos de esos años en coalición con IU, y criticó que “no modificaron esa norma”.
Según los datos aportados por el consejero, en Andalucía hay un 40% menos de locales de máquinas recreativas desde 2009 a 2019 al pasar de 23.404 a 16.652, el mismo número de salones de juego desde 2010 –859–, en un sector del juego que cuenta con 5.000 trabajadores en sector y 3.500 indirectos. También ha descendido el número de adictos al juego hasta unas 2.300 personas, según Bravo, que recriminó al PSOE y Adelante que hagan “demagogia” porque cuando gobernaban no hicieron cambios en la normativa y ahora se niegan a apoyar el decreto con las modificaciones que prepara el ejecutivo andaluz porque “tienen distinta vara de medir”.