UNAS TABLAS COMO AGUA DE MAYO EN EL CAMP NOU
OPINIÓN bien extendida aunque no signifique que sea garantía de nada es que quien gane esta tarde en el Camp Nou va a salir campeón de Liga. Entre que el Atleti es y ha sido líder durante todo el curso y que el Barça es quien más fútbol atesora con el plus de que a su favor juega Messi, el pronóstico general es que el ganador de ese partido de partidos que se libra a partir de las cuatro y cuarto en el Camp Nou será el campeón.
Pero ¿y si empatan? Es el resultado que anhelan los otros dos que se mantienen en la mesa de este apasionante póquer. En la Liga de tres puntos, las tablas son el resultado favorito de los terceros en discordia y un empate esta tarde entre colchoneros y culés le daría al Madrid-Sevilla de mañana una dimensión mayor de la que tendría. Dimensión multiplicada sobre todo para un Sevilla que vio cómo el gol de Iñaki Williams sobre la campana le bajó la caña espectacularmente.
Pero lo primero es lo primero de la misma forma que resulta imposible marcar el segundo gol si antes no se marcó el primero. Y lo primero es este Barça-Atlético que va a jugarse a una hora que nos lleva a cuando al fútbol se iba en tranvía con la digestión en su apogeo. Dos puntos arriba el Atleti, el empate le valdría, pero sólo para esperar a ver qué sucede en Valdebebas cuando el domingo esté tocando a su fin y tanto Madrid como Sevilla se las estén teniendo tiesas.
Parece que es el Barça el que parte de favorito, aunque su irregularidad sea manifiesta. También el Atleti anda concediendo favores, pero la causa principal de que haya menguado su velocidad de crucero tiene como causa principal la ansiedad y el vértigo que te mete en el cuerpo perder lo que llevas atesorando tanto tiempo. Ocurra lo que ocurra, el tiempo de vísperas no puede ser más apasionante. Y para mañana, más de lo mismo, qué maravilla de Liga estamos viviendo.
El Barça-Atleti en plena digestión es la primera final de un fin de semana no apto para cardíacos