Los campos de golf recuerdan que “sólo se riegan con agua regenerada”
regional y local, y acometer todas las inversiones programadas”.
La CEA asegura que “el Plan Hidrológico Nacional ya contempla un déficit hídrico estructural que, en opinión de CEA, se corresponde con un histórico déficit de inversiones. Entender que el mayor o menor nivel de recursos hídricos está relacionado sólo con el nivel de precipitaciones supone no tener en cuenta los importantes instrumentos organizativos y tecnológicos existentes. Hoy día, disponer de más recursos está ligado a la capacidad de gestión e inversión de cada territorio”.
Andalucía “cuenta con un litoral con una alta demanda de agua, tanto para producción como para la vida urbana, pero con enormes posibilidades”. “Disponemos de 945 kilómetros de costa que se reparte entre cinco provincias, pero sólo en dos, –Málaga y Almería–, existen desaladoras. Tenemos un potencial de más de 12.000 kilovatios en energía renovable de inminente implantación, que pueden alimentar de forma sostenible nuevas plantas desaladoras”.
Los empresarios quieren recordar que en su comunidad “están bastante extendidas las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR), que podrían incrementarse más siendo usados sus recursos directamente para el regadío. El 75% del agua que usan actualmente los campos de golf, por ejemplo, tienen un origen en la regeneración gracias a la previsión e inversión necesaria. A tal fin es fundamental agilizar los procedimientos administrativos para el uso del agua regenerada. Hay sectores industriales que han requerido de casi dos años de tramitación para acceder a esos recursos”.
Por otra parte, recuerdan también que “la Andalucía interior dispone de zonas con un amplio margen para favorecer el embalsamiento de agua, que debe ser facilitado tanto para lo público como para lo privado. Y una vez embalsada, se ha de favorecer la adecuada gestión del agua, con los trasvases que sean necesarios, huyendo de localismos y con una acción coordinada de las Administraciones competentes”.
En relación con el almacenamiento junto a nuevas infraestructuras también “se puede acometer el recrecimiento de las existentes. Se puede apostar por una mayor eficiencia, aprovechando la actual situación de vaciado, por ejemplo, para acometer tareas de mantenimiento que faciliten incrementar la capacidad de embalsar”.
La Asociación Española de Campos de Golf salió ayer al paso de la petición de Adelante Andalucía al presidente de la Junta, para que proceda al cierre de sus instalaciones mientras dura la actual situación de sequía. Su vicepresidente, Carlos Pitarch, aclaró que “se parte de un error, ya que los campos de golf únicamente se riegan con agua regenerada, es decir no se compite en absoluto con la destinada al consumo humano, sino que se hace con la que se dedica a las labores agrícolas”.
Adelante Andalucía había señalado que “un campo de golf es radicalmente insostenible. Los 109 campos de golf hasta al año el mismo agua que consume un millón de personas”.
Pitarch quiso aclarar que “los campos de golf reutilizan el agua que no es utilizada para el consumo humano” en su inmensa mayoría de los casos, que cifra en torno al “75% de los mismos; el resto se encuentra pendiente de la construcción de las instalaciones para poder hacerlo.
Además, quisieron poner de manifiesto que “las necesidades de los campos de golf en Andalucía apenas suponen una cantidad en torno a los 35 hectómetros cúbicos de agua”. Con ella, “se riegan las 3.500 hectáreas de suelo que ocupan, pero también se genera de una manera directa el 1% del PIB andaluz y se crean un total de unos 52.000 puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos”.
Demandan compromiso y unidad de acción entre todos los implicados