Diario de Sevilla

Susana Díaz hace campaña... por ella

● La ex presidenta de la Junta tiene agenda propia para estas municipale­s, hacerse sentir por si Pedro Sánchez pierde las generales

- JUAN MANUEL MARQUÉS PERALES

CADA campaña tiene su afán, y la de Susana Díaz es muy personal, se trata de mostrarle a su partido y a los medios que la ex presidenta no ha muerto en lo político. Bueno, eso es una interpreta­ción; la otra, que es más maliciosa, es que se huele la tragedia, que ella quiere hacerse un hueco en el funeral, político, de Pedro Sánchez y de Juan Espadas. Ésa es su apuesta, se le nota mucho y, por eso, siempre pierde. Perdió las primarias contra Pedro Sánchez, las elecciones contra Juanma Moreno y las otras primarias contra Juan Espadas, se refugió en el Senado y en Todo es mentira, el programa de Risto Mejide en Cuatro. Pero, cuidado, que La Fábrica de la Tele, la productora de la mentira, es la gran derrotada de una guerra mediática que ha dejado en minimalist­a todas las batallas internas del PSOE, la de Mediaset, donde Unicorn Content, la firma de Ana Rosa Quintana, ha terminado por derrotar a todos los Sálvame.

Susana Díaz tiene su propia agenda electoral. Este lunes ha acompañado al candidato socialista de la Puebla de Guzmán, en Huelva; el jueves va a Cuatro y a Écija; el viernes tiene Cómpeta y La Viñuela, en Málaga; el sábado, Albuñol y Otivar, en Granada, y el domingo termina en Fornes, en la misma provincia. Como turronera es excepciona­l, no hay pueblo donde no haya puesto la tarima. La semana pasada se recorrió el litoral almeriense, y aprovechó para ir lanzando mensajes a su partido: que si tiene mucho carrete aún, que si la Papisa no habla del Papa, que si ella y Pedro Sánchez hablan, pero tienen proyectos diferentes de país. Ahí hay tomate.

¿Dónde va Susana? ¿Qué pueblos busca entre los 785 municipios andaluces? ¿Qué alcaldes socialista­s la pretenden, de los 459 que tiene el puño y la rosa? Sólo hay que ver las fotos de los actos para llegar a una conclusión certera, son aquellos que estuvieron con ella hasta la última batalla, la de las primarias socialista­s de Andalucía. Algo menos, claro, porque muchos no desean señalarse ante la nueva etapa que se puede abrir en 2024.

La dirección del PSOE andaluz le ha aplicado sordina, deja que se pasee por donde la invitan, no entran en polémica para no activar el victimismo de la que siempre ha hecho gala Susana Díaz, pero Juan Espadas se refirió ayer a ella en Sevilla. Estas elecciones, dijo Juan, son de los candidatos y los alcaldes, no de otros dirigentes que van buscando el calor de los focos. Bueno, cada uno tiene su afán.

La apuesta de Díaz por el zurriagazo de Pedro Sánchez es, cuanto menos, temerario. Primero, porque se le nota demasiado, y segundo, porque la ex presidenta es un activo del PSOE con el que el partido y el Gobierno contarían de no ser por su ánimo de revancha. Vamos a ver, que Antonio Hernando, el rubalcabit­a que defendió la abstención en la investidur­a de Mariano Rajoy, está trabajando en La Moncloa, junto a Óscar López, los dos acogidos en un gesto de magnanimid­ad por Pedro Sánchez. ¡Y hasta pueden ser ministros!

Susana Díaz es una política con virtudes, muy válida para el PSOE, pero se empeñó en coger el camino equivocado como única estrategia. Pudo ser eurodiputa­da, presidenta del Senado y hoy estaría como todo los dirigentes socialista­s, esperando a ver qué ocurre en 2024, pero sin señalarse. Ella es así.

2024 es un melón que aún no está catado. En diciembre de este año hay elecciones generales, y aún no hay un pronóstico por el que merezca la pena apostar un euro. Si Pedro Sánchez perdiese, el PSOE entraría en una crisis para resolver lo que habrá sido un paréntesis en su historia; si ganase frente a Feijóo, o lograse formar Gobierno con lo que los portuguese­s llaman una jerigonza, los que entrarían en ebullición serían los chicos de San Telmo, porque Juanma Moreno figuraría entre los pocos nombres que podrían relevar al dirigente gallego. ¿Y Juan Espadas? Juan impone otro ritmo, quien le suceda no tendrá más de 40 años, Susana podrá picotear un poco, pero ya no será para ella.

 ?? SDC ?? Susana Díaz, en Garrucha, la semana pasada.
SDC Susana Díaz, en Garrucha, la semana pasada.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain