“Hay que estar al loro”
● El jiennense actuará en la plaza de toros de la Real Maestranza el próximo 15 de septiembre dentro del ciclo ‘Noches de la Maestranza’
Victoria es una palabra polisémica y el título del último disco de Raphael. El músico de Linares se acerca a los 80 convertido en uno de los artistas más admirados y queridos de España, una figura internacional, un icono y un referente para las nuevas generaciones de creadores que lo ven llenar estadios con público de todas las generaciones. El próximo 15 de septiembre llegará a Sevilla. Concretamente en la Plaza de toros de la Real Maestranza dentro del ciclo Noches de La Maestranza.
Victoria
– no hace referencia ni a un nombre de mujer ni al resultado de una justa deportiva o guerrera, sino a un triunfo de la vida.
–Sí, es una victoria de la vida sobre muchas cosas en el ámbito familiar, en el personal, en mi carrera... En todos los ámbitos habidos y por haber. Ha sido una vida maravillosa.
–Superó un problema de salud que puede considerarse como una victoria total de la vida.
–Fue una victoria con repique de campanas. Hace muchos años, pero pesará siempre para bien.
–Pocos artistas pueden tener una trayectoria tan larga y seguir a la última. ¿Cuál ha sido el secreto para acercarse a las nuevas generaciones?
–He tenido la oportunidad de hacerlo y lo he hecho. Y más de la mitad del público de mis actuaciones es joven. Es un aliciente reunir a tantas generaciones en el mismo espacio.
–Su caso parece una singularidad en la música española. Sí existen artistas internacionales con seguidores de todas las generaciones, estilo The Rolling Stones pero, ¿hay algún otro fenómeno en la música española con una trayectoria tan larga que siga llegando a Festivales como el Sonorama?
–No sé querida amiga. No estoy preocupado por lo que hace los demás. Ya tengo yo bastante con preocuparme de mis cosas, saber saltar las edades para llegar a todos los públicos. Yo creo que cada uno lo hace a su manera y unos persiguen más y otros menos.
–Igual estudiar su caso en las universidades serviría para dar pistas a otros de la clave. ¿El secreto puede ser rodearse de gente joven, como Pablo López, que lo acompaña en este trabajo?
–Yo creo mucho en él y hemos hecho un disco maravilloso. Además no será el último. Estoy feliz con haberlo encontrado y haber tenido la chispa que tenemos para poder componer y cantar.
–Ha comentado en alguna entrevista que en cuanto lo vio en televisión supo que quería trabajar con él.
–Sí, y esto fue hace ya ocho años. Por eso en este concierto llevo un repertorio de todas las edades, con canciones que son un éxito en la historia musical, hasta llegar a los temas nuevos.
–De esos últimos 11 que componen su último disco, ¿tiene algún favorito?
–Sí, claro, Victoria y Zapatos.
-¿Son los más personales?
–Son también los más personales de mucha gente.
–84 discos y 60 años haciendo giras. ¿Sigue siendo el que empuja al resto del equipo?
–Sí, yo soy el que empujo, indudablemente. Vamos, en condiciones normales que yo esté bien.
–Se planifican las giras de otra manera cuando uno tiene una cierta edad.
–Procuramos que tenga tiempo para la familia también y días de descanso. Todo el mundo debe tenerlos, pero es que yo antes ni eso: empalmaba una cosa con otra de una manera leonina. Ya he aprendido que de vez en cuando hay que parar e ir al cine, al teatro, irte a Londres a ver que se cuece, ir a Nueva York y ver qué se cuece allí también... Si han aprendido algo que yo no sepa. Hay que estar al loro.
–Y vivir más y trabajar, sino menos, sí de otra manera.
–Sí, porque tampoco he af lojado mucho pero he aprendido a hacerlo menos agobiante. Sobre todo por los viajes. No estar en un lado y tener que ir a otro continente al día siguiente. Take it easy en los viajes.
Más de la mitad del público de mis actuaciones es joven. Es un aliciente reunir a tantas generaciones”
Yo creo que cada uno lo hace a su manera y unos persiguen más y otros menos”
–Imagino que la estabilidad sentimental y familiar que ha tenido junto a su esposa, Natalia Figueroa, y sus hijos, le habrá ayudado a focalizarse en su carrera. ¿Ella pide ahora que se quede más en casa y haga vida con los nietos?
–Sin duda, que he tenido y que tengo. No me lo pide y sigue apoyando porque sabe que es mi sueño, mi vida. Siempre me ha ayudado y me ayuda mucho.