El Valencia respira hondo y mete en problemas al bloqueado Celta
1 2 Celta Valencia
Iván Villar; Hugo Mallo, Tapia, Unai Núñez, Cervi; Carles Pérez, Gabri Veiga, Beltrán, Luca de la Torre (Óscar Rodríguez, 54’); Seferovic (Paciencia, 78’) y Aspas (Larsen, 54’).
Mamardashvili; Foulquier, Diakhaby, Paulista, Gayá; Javi Guerra (Marí, 78’) Nico (Moriba, 70’), Almeida; Diego López (Yunus, 61’), Kluivert (Hugo Duro, 78’) y Lino (Lato, 61’).
(8’) Kluivert.
(88’) Alberto Marí.
Soto Grado (riojano). Expulsó a Paulista (92’) por doble amonestación. Amarilla a Luca de la Torre y Gabri Veiga por parte del Celta, y a Diakhaby, Moriba y Almeida por parte del Valencia.
El Valencia respira en la clasificación gracias a su agónico triunfo en Balaídos, donde el joven Alberto Marí desniveló con un cabezazo en el minuto 88 su partido contra el Celta, que igualó en el segundo tiempo el tanto de Kluivert pero acabó sufriendo una dolorosa derrota que le complica su futuro.
La decadencia del Celta ha coincidido con el bajón de Iago Aspas. Ante el Valencia jugó tocado, y lo acusó. Aspas quiere pero no puede, y el mejor ejemplo es que fue sustituido en el inicio del segundo tiempo, algo que no se recordaba en Balaídos.
El partido era una final para ambos equipos. Se notó en el ambiente, en la tensión que reinaba en los banquillos. El Celta la encaró sin dos de sus indiscutibles en defensa, Aidoo y Javi Galán. Y sus problemas se multiplicaron tras un error de Cervi, el elegido para ocupar el lateral izquierdo, que Diego López aprovechó para poner un buen centro a Kluivert, que definió con calidad.
Perdonó el equipo de Baraja, y lo acabó pagando porque poco después el internacional suizo Seferovic, que ya había probado a Mamardashvili, igualó el duelo con un remate de cabeza. Al final, Marí aprovechó un enorme desajuste defensivo de los centrales.