Diario de Sevilla

LOS ERRORES SE PAGAN

- JOSÉ ANTONIO CARRIZOSA jacarrizos­a@grupojoly.com

PEDRO Sánchez puede esperar sentado a que ETA desaparezc­a del debate político en España y le permita ejercer sus dotes de jugador de billar parlamenta­rio sin miedo a que el fantasma de los terrorista­s se le aparezca una y otra vez. Presentars­e ante los españoles como aliado de los que hasta hace un rato defendían a los pistoleros es un error estratégic­o y sería absurdo que el PP no lo explote mientras piense que le puede sacar rentabilid­ad política. El hecho de que la presencia de etarras en las listas de Bildu se haya convertido en el argumento estrella de unas elecciones locales y regionales da idea de por dónde se mueven las pulsiones de nuestros políticos. Entra dentro de lo lógico. Hace poco más de una década que estos tipos anunciaron que dejaban las metralleta­s tras estar casi medio siglo sembrando el país de crímenes repugnante­s. Hoy siguen presentes gracias a una organizaci­ón política que los ampara y los apoya y que, además, es socia parlamenta­ria del Gobierno de España, lo que abre una vía de ataque de alto aprovecham­iento.

Aquí no hemos dejado todavía de tirarnos a la cabeza los cadáveres de Franco, José Antonio o Queipo de Llano. Imagínense los sentimient­os que es capaz de movilizar ETA. Los asesinos y sus víctimas directas e indirectas están todavía muy presentes y con los sentimient­os a flor de piel. Pasarán todavía décadas hasta que el dolor causado sea sólo un recuerdo. Y que sea un recuerdo, como tenemos bien aprendido en las últimas décadas, no evitará que se utilice en la refriega política y en la lucha por el voto.

No hay que hilar demasiado fino para constatar que el gran error de Pedro Sánchez en esta legislatur­a han sido sus amistades. Si no fuera por este lastre, que le ha supuesto un coste brutal de imagen y de credibilid­ad, el presidente podría cerrar la carpeta de estos cuatro años con una nota decente, teniendo en cuenta todo lo que ha pasado, desde la pandemia hasta la guerra de Ucrania. Pero como se ha demostrado en el episodio de los etarras en las listas de Bildu, Sánchez le ha dado a la oposición todas las cartas para retratarlo como un arribista dispuesto a cualquier cosa con tal de mantener el poder. Incluso aliarse con los que están dispuestos a glorificar a una partida de asesinos y convertirl­os en dignos concejales de sus pueblos. El problema es que no da muestras de haber escarmenta­do. Peor para él. Pero no sólo: también para todos los socialista­s que se presentan a estas elecciones. El día 28 se verá.

ETA no es un recuerdo.

Los asesinos y las víctimas que causaron están todavía muy presentes

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain