POR LA ESCUADRA
SE indigna Sánchez porque según él Feijóo y varios medios de comunicación han metido a ETA en la campaña. Yerra el presidente del Gobierno. No han sido el PP y periodistas críticos, sino Bildu. Sus queridos socios de Bildu, a los que Sánchez tanto ha mimado a lo largo de la legislatura, ante el estupor y la preocupación de otro de sus socios habituales, el PNV.
Bildu fue el que incluyó a setenta y tantos etarras y simpatizantes de etarras en sus listas, lo que descubrió Covite, una de las asociaciones de víctimas del terrorismo, cuando empezó a revisar las biografías de los candidatos de Bildu. Demostró así que en estas lis
tas iban varios condenados de ETA. Unos por asesinato, y otros por colaboración.
Ha sido Bildu, no Feijóo, quien ha metido un gol a Sánchez por toda la escuadra. Porque en Bildu sigue mandando Sortu, que no solo no reniega del terrorismo sino que presume de que en cualquier momento puede volver a ejercer su inmunda labor para reivindicar sus eternos objetivos, la independencia de Euskal Herria. Así que menos atacar a quienes nada tienen que ver con la “aparición” de ETA en la campaña electoral, y más reflexionar sobre las consecuencias de tomar decisiones equivocadas y aliarse con quien nadie se aliaría nunca, excepto los que no ponen límite a hacer lo que sea, lo que sea, con tal de mantenerse en el Gobierno.
El gol de Bildu está siendo sonado, pero hay otro personaje que también mete goles a
Ha sido Bildu, no Feijóo, quien ha metido un gol a Sánchez por toda la escuadra. Porque en Bildu sigue mandando Sortu
Pedro Sánchez, aunque el presidente no parece darse cuenta.
Entre las virtudes de Pedro Sánchez no se cuenta la de adivinar desde lejos si quienes se le acercan son o no fiables. Pablo Iglesias le salió rana, llevó al Gobierno a sus afines pero no a los mejores de Podemos, y además se largó cuando fracasó como candidato de Madrid. Desde fuera, se dedicó y dedica a crear problemas a Sánchez. Pero no es Pablo Iglesias quien le ha metido el gran gol al presidente, sino Yolanda Díaz, que con su mensaje de amor, paz y felicidad ha conseguido embaucar a unos cuantos y, sin presentarse a estas elecciones, está consiguiendo reducir los votos del PSOE y también de Podemos, que esperan a que Sumar se presente en las generales para darle su apoyo. Lo que significa que la bajada de Podemos y de los socialistas puede impedir que el PSOE se mantenga en algunos gobiernos y alcaldías.
No ha estado muy listo Pedro Sánchez promoviendo a su vicepresidenta segunda a las alturas, como tampoco lo ha estado llevando a Bildu a una cota de poder jamás soñada por los simpatizantes de ETA.
No pasará Sánchez a la historia por su capacidad para detectar peligro.