El Gobierno considera inviable el macrocomplejo de Trebujena
● La Confederación Hidrográfica apunta a que no abastecerá de agua al ‘megarresort’ y que la competencia de su construcción es autonómica
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) rechazará la solicitud de que esta cuenca pueda aportar recursos de agua al macroproyecto turístico para construir hoteles, un campo de golf y 300 casas en Trebujena , cerca del Parque de Doñana.
Además, informará de que la competencia para autorizar construir en la zona, que es inundable, es de la Junta de Andalucía.
Fuentes de este organismo de competencia estatal indicaron a Efe que el informe de la CHG se está ultimando y se emitirá en las próximas semanas. El informe debe responder a dos solicitudes sobre el polémico macroproyecto.
Respecto a la solicitud de recursos hídricos, la CHG emitirá un informe desfavorable, ya que el Plan Hidrológico no contempla asignaciones de “nuevos recursos que no están planificados”.
La Declaración Ambiental Estratégica (DAE) en la que la Junta de Andalucía da su visto bueno al proyecto incluye un anexo en el que afirma que hay “disponibilidad de recursos hídricos” para abastecer a Trebujena con el crecimiento que el proyecto plantea, en la Demarcación Hidrográfica del Guadalete-Barbate, una cuenca competencia de la Junta de Andalucía.
Sobre la ubicación del proyecto en unos terrenos inundables, una marisma desecada, la CHG informará de que el proyecto está en zona de dominio publico marítimoterrestre y que las posibilidades de construcción en esa zona son competencia de la Junta de Andalucía.
No obstante precisará que la zona es inundable, lo que limita los usos de ese suelo, según las mismas fuentes.
Partidos de izquierda como Por Andalucía y Adelante Andalucía, además de algunas organizaciones ecologistas habían hecho pública durante la jornada de ayer una petición para que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir paralizara el macroproyecto urbanístico y turístico.
“Pero, ¿qué les pasa a estos señores que quieren cargarse Doñana a toda costa? La urbanización es un completo disparate”, denunciaba la portavoz parlamentaria del PSOE-A, Ángeles Ferriz. La socialista ha criticado que Moreno gaste “más dinero” en propaganda que en infraestruturas hídricas, mientras hay municipios como Santa Olalla del Cala donde hay restricciones de consumo de agua para las familias.
La portavoz parlamentaria de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, definió el macroproyecto como un ejemplo “más de la gestión kamikaze” del agua y del desarrollo urbanístico que “pretende” el Gobierno de Moreno, y ha alertado de que es una “temeridad”.
En términos más duros se expresó el portavoz parlamentario del grupo Mixto-Adelante, José Ignacio García, que acusó al Ayuntamiento de Trebujena, gobernado con mayoría absoluta por IU, de impulsar este proyecto al que ahora ha dado el visto bueno la Junta: “Es un atentado medioambiental y una barbaridad a escasos kilómetros de Doñana, en las marismas secas del Gualdalquivir, cuando los agricultores de la zona no tienen agua para regar los cultivos”.
Para Carlos Molina, técnico de la Oficina de SEO/Birdlife en Doñana, el proyecto es cuanto “menos poco afortunado” por el momento en el que se presenta, en una situación grave de sequía y sin el uso sostenible de la poca agua que hay.
Esta organización presentó en 2019 alegaciones al macroproyecto al considerar que donde se pretende construir es muy importante para las aves y produce “afecciones” a zonas de la Red Natura 2000, a la cepa del bajo Guadalquivir y “seguramente” al Parque Nacional de Doñana, que se encuentra justo enfrente.