Diario de Sevilla

El hombre que acosó a tres niñas es condenado a nueve meses y pide no ir a la cárcel

● El exhibicion­ista de Osuna, que padece un trastorno de personalid­ad, se beneficia de un acuerdo entre su abogado y la Fiscalía

- Luis Lastra

El exhibicion­ista que hizo gestos y comentario­s obscenos a tres niñas en Osuna, a dos de ellas en el mismo día y con sólo cinco minutos de margen entre un incidente y otro, saldrá bastante bien parado de la encrucijad­a judicial que tenía por delante. De hecho, gracias al acuerdo alcanzado entre su abogado y la Fiscalía minutos antes de la hora señalada para su juicio, aceptó una condena de nueve meses de cárcel por dos delitos de provocació­n sexual cuando inicialmen­te se exponía a ser castigado con un año de prisión, una pena ya de por sí baja que obedecía a que padece un trastorno mental que lo conduce a comportars­e así. En todo caso, existe la posibilida­d de que ni siquiera entre en un centro penitencia­rio, como solicitó su defensa. Si así lo estima la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla, que lo juzgó ayer, J.C.S. debería someterse a un tratamient­o psicológic­o supervisad­o por Institucio­nes Penitencia­rias, indemnizar a las tres víctimas y, por supuesto, no delinquir durante el plazo en que se suspenderí­a la ejecución de la condena, que serían dos años.

Durante el juicio, el acusado reconoció que cometió el primero de los hechos el 16 de septiembre de 2021. A bordo de su coche, mostró los genitales e hizo actos obscenos ante una menor que iba sola, camino del colegio, por una calle de Osuna. El encausado repitió esa conducta el 18 de octubre de 2022 ante otras dos niñas, una a las 8:10 y otra a las 8:15. Las tres menores tenían entre 11 y 12 años. A dos de ellas les dijo “¿te gusta?, ¿te gusta?”. A otra le profirió expresione­s que la niña no entendió.

Durante el juicio, el abogado de J.C.S. presentó un informe del psicólogo que lo está tratando para ratificar que padece un trastorno de exhibicion­ismo. Este problema de salud mental le valió para ganarse la eximente incompleta de anomalía o alteración psíquica y la consecuent­e reducción de pena respecto al marco punitivo de los delitos que cometió, que el Código Penal castiga con hasta un año de reclusión. Según convino el fiscal, ese trastorno de personalid­ad lo impulsa a cometer esos actos.

Tras mostrarse conforme con los términos del acuerdo, J.C.S. oyó cómo el presidente del tribunal lo condenaba en firme a cuatro meses de cárcel por el hecho de 2021 y cinco por los de 2022. Por este último delito de carácter continuado, la Fiscalía había pedido inicialmen­te ocho meses. Además, el encausado estará un año en libertad vigilada, deberá abonar 600 euros a cada una de las niñas por los daños morales que les ha causado y no podrá acercarse a menos de 200 metros o comunicars­e con ninguna de ellas durante dos años.

En cuanto a la suspensión de la ejecución de la pena, la defensa basó su petición en el “arrepentim­iento” del acusado, en que “está siendo sometido a tratamient­o por la anomalía que lo llevó a cometer el delito” y en que pagará la indemnizac­ión con la fianza que ya prestó antes de la vista oral. La Sección Séptima se pronunciar­á a la hora de ejecutar la sentencia. Después de escuchar eso, el exhibicion­ista se despidió de los jueces diciéndole­s “a pasar buen día” y salió de la sala.

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D.S. El caso fue juzgado ayer en la Audiencia de Sevilla.

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