El caso Vinícius centra un difícil debate con el racismo de fondo
lista y, en teoría, debería repetir en el lateral izquierdo. En la medular el recambio natural del luso es Guardado, mientras que Rodri podría entrar como titular en lugar de un Luiz Henrique muy desacertado en sus últimas actuaciones. En esa línea de mediapuntas deben mantenerse Canales, jugador franquicia, y Ayoze, intocable para Pellegrini desde su llegada. La duda es si el tinerfeño puede adelantar su posición para ocupar la delantera o mantenerse por detrás acompañando a Borja Iglesias.
En la retaguardia Luiz Felipe y Pezzella deben seguir liderando una defensa que ha encajado sólo un gol en los últimos tres encuentros, los mismos en los que Claudio Bravo ha echado el cerrojo a su portería ganándose el derecho a seguir bajo palos y, seguramente, a una renovación por un año más deseada también por el técnico.
Enfrente, Bordalás ha utilizado a los jugadores que más conoce de su anterior etapa desde que sustituyera en el cargo a Quique Sánchez Flores. Salvo Gastón Álvarez y Mitrovic, el resto de sus alineaciones estuvieron marcadas por la presencia de hombres con conocimiento profundo de los deseos de su entrenador.
Los más afectados han sido nombres como Luis Milla o Domingos Duarte, fijos con Quique y en el banquillo con Bordalás. Ahora, Bordalás, ante la posible ausencia por lesión de Arambarri (duda hasta última hora), deberá decidir si formar un once con alguno de sus medio centros disponibles como el mismo Milla o como Gonzalo Villar y Ángel Algobia, o, como hizo en el Bernabéu y en la segunda parte frente al Elche, volver a colocar a Djené en el centro del campo. Además, recupera a Mata tras cumplir sanción, si bien Munir, goleador la pasada jornada y por su pasado sevillista, podría mantenerse en el once inicial.